Hace 20 años, Volkswagen se adentraba en el segmento de las berlinas de lujo con el Phaeton, un vehículo que como ya te contamos en otras oportunidades, fue un verdadero fracaso comercial. Sin embargo, a modo de homenaje por estas dos décadas que pasaron desde su lanzamiento, la marca alemana mostró el prototipo de una segunda generación, que nunca llegó a producción.
En un comunicado, Volkswagen aseguró que el reemplazo del Phaeton nunca vio luz verde debido a que en aquella época (2016), la marca había comenzado su estrategia de electrificación, con el desarrollo de lo que ahora es la familia de productos ID. El proyecto se denomina “Phaeton D2” y fue concebido sobre la plataforma modular MLB del grupo alemán.
Y si bien se trata un prototipo, el vehículo que ves en imágenes sirvió de base para el desarrollo tecnológico que luego se aplicó en otros modelos tope de gama de la marca. De hecho, el responsable de diseño del interior del modelo en aquel entonces, destacó que “el habitáculo del Phaeton D2 se adelantó a su tiempo con características como la pantalla curva, que luego fue lanzada al mercado en 2018 en el Innovision Cockpit del Touareg”.
Historia del Volkswagen Phaeton
El proyecto del Volkswagen Phaeton fue presentado a fines de los 90 por quien era en ese momento uno de los máximos directivos del grupo: Ferdinand Piëch, que quería ingresar al mercado mundial con un nuevo sedán de lujo que al mismo tiempo llevara a la marca a otro nivel de exclusividad.
Con un largo de 5,06 metros, un ancho de 1,90 y una altura de 1,45 metros, el Phaeton se ubicaba en el pináculo de la gama de sedanes ofrecida por la marca alemana en aquel entonces, apuntando a rivales como Mercedes-Benz Clase S, BMW Serie 7 y Audi A8.
Con un diseño sobrio pero que destilaba solidez 100% alemana, este sedán era una especie de “Maxi Passat”. Adoptaba líneas convencionales pero que al mismo tiempo le aportaban identidad propia sobre todo en el sector posterior, con faros traseros que adoptaban un estilo que luego se vería en los Volkswagen de gama inferior.
Otro aspecto diferencial del Volkswagen Phaeton respecto de cualquier otro modelo de la marca estaba en su comportamiento, gracias a una sistema de suspensión neumática de serie con amortiguadores adaptativos, que permitían una marcha suave y segura en cualquier condición de utilización.
Puertas adentro, el Volkswagen Phaeton destilaba confort, seguridad y calidad. La plancha combinaba materiales de primer nivel con detalles en cuero y madera e incorporaba detalles de distinción, como las rejillas de ventilación cubiertas por unos paneles de madera que se abrían de manera eléctrica cuando se requería su funcionamiento.
En lo que respecta a la gama de motores, en una primera etapa se ofrecieron dos impulsores nafteros y una opción TDI. Como “entrada de gama” estaba un V6 con 3,2 litros (el conocido VR6) que en este caso entregaba 241 CV. Por su parte, el motor más potente era un poderoso W12, que básicamente eran dos V6 diseñados en forma de “W”. En este caso la potencia era de 420 CV con una cilindrada de 6 litros.