Tras la llegada de la última generación del Clase C el año pasado, Mercedes-Benz inicia la comercialización en Argentina del renovado GLC, el SUV que toma la base del histórico sedán.
“La nueva GLC está llamada a continuar su historia de éxito. A nivel mundial, es el modelo más vendido de Mercedes-Benz de los últimos años y, por lo tanto, uno de los automóviles más importantes de nuestro portfolio. Estoy convencido de que esto es gracias a la combinación de confort y dinamismo en el manejo, unido a un moderno diseño y grandes prestaciones. Desde su primera generación, la GLK, esta SUV ha recibido gran aceptación por parte de los clientes argentinos. Son muchos los fanáticos de este modelo. El año pasado se presentó mundialmente esta tercera generación de la GLC y ya está entre nosotros disponible en nuestra red de concesionarios’’, afirmó Roberto Gasparetti, manager y director de Mercedez-Benz Argentina.
Así las cosas, el nuevo Mercedes-Benz GLC llega al país en una única versión 300 4Matic Mild Hybrid, tecnología que hereda de la Clase C. En términos de dimensiones se destaca la mayor longitud de la carrocería frente a la generación anterior (+60 mm), una menor altura (-4 mm) y un aumento de la distancia entre ejes (+15 mm), con lo cual a priori este SUV ofrecerá un habitáculo espacioso digno de un vehículo de este segmento.
En líneas generales no hay demasiada evolución en materia estética pero en este caso las versiones que llegarán al país tendrán de serie el paquete AMG Line, que entre otras cosas agrega llantas de 19 pulgadas con un aspecto que imprime mayor deportividad a la carrocería.
Dentro de las novedades más visibles se destacan las nuevas ópticas con tecnología LED y un formato más afilado, mientras que la parrilla conserva el aspecto de la generación anterior. Gracias a varios retoques en el paragolpes, el resultado final es atractivo y mantiene la clásica solidez visual alemana.
Puertas adentro del paquete AMG Line incluye asientos deportivos con regulación eléctrica y memorias. A eso se suman el volante multifunción de nuevo diseño revestido en cuero y un sistema de iluminación ambiental de 64 colores diferentes.
Con respecto a la conectividad y la multimedia, el nuevo GLC incorpora el instrumental digital denominado MBUX que apela a una pantalla de 12,3’’ con la posibilidad de contar 3 estilos diferentes de visualización. A su vez, complementa este combo la pantalla central del equipo de navegación de 11,9’’.
El equipamiento de confort y seguridad es el esperado para un vehículo de este segmento y posicionamiento, con una dotación que incluye apertura y cierre de puertas por botón, portón trasero con apertura eléctrica, siete airbags y una varios ADAS como asistente de estacionamiento y control activo de distancia denominado DISTRONIC.
Como mencionamos más arriba, el nuevo Mercedes-Benz GLC estará disponible con una única opción mecánica. Se trata de un motor naftero de cuatro cilindros con 2 litros de cilindrada que produce 258 CV y 400 Nm de torque. Por su parte, la transmisión corre por cuenta de una caja automática de nueve marchas. La marca declara para este modelo una aceleración de 0 a 100 km/h en 6 segundos y una velocidad máxima de 240 km/h.
El sistema de propulsión híbrido consiste en un pequeño generador de 48 volts y un arrancador alternativo, que ofrece asistencia en la gama baja de revoluciones o según el requerimiento de potencia por parte del conductor.
Claro que todo tiene un precio. El nuevo GLC 300 se anuncia en Argentina con un valor sugerido de 145.000 dólares.