El Honda Civic se comercializó en Argentina prácticamente en la mayoría de sus generaciones. Sin embargo, desde la séptima (y hasta la décima) el mediano de la marca japonesa variaba su estética de acuerdo al mercado donde se comercializaba. Por eso, en esta ocasión a la venta un Civic muy particular.

Una vez más, gracias a la gentileza de uno de nuestros seguidores @lmmexotics en las líneas que siguen vas a ver un Honda Civic que pertenece a la novena generación, esa que llegó a la Argentina importada de Brasil entre 2012 y 2016. Sin embargo, en este caso es una unidad de las que se comercializaban en Estados Unidos y por eso presenta algunas diferencias estéticas y de equipamiento.

De acuerdo al anuncio este Civic es modelo 2014 y en la descripción aclara que está patentado en el 2018, con lo cual seguramente estamos ante otro caso de repatriación. Como distintivo, en la trompa las ópticas presentan detalles en color naranja, una característica de los vehículos comercializados en el mercado norteamericano.

La diferencia más importante a nivel estético en este Honda Civic está en el sector posterior, con faros que son distintos a los del modelo que llegaba a nuestro país desde Brasil (ver foto). El resto del auto en general no exhibe cambios frente al Civic del Mercosur.

Continuando con el anuncio, en la descripción especifica que se trata de una versión EX-L (la más equipada que se ofrecía en aquella época) y el odómetro acusa un bajo kilometraje (26.800 kilómetros). Además, aclara que dentro del equipamiento se destaca la presencia de butaca eléctrica y asientos delanteros calefaccionados, algo que no ofrecía el Civic en nuestro mercado, al menos en esta generación en particular.

Donde no hay cambios respecto de los Honda Civic fabricados en Brasil es bajo el capot. Este ejemplar conserva el conocido 1.8 aspirado que entrega 140 CV y 174 Nm de torque, mientras que la transmisión en este caso corre por cuenta de una caja automática de cinco velocidades.

Por último, quizás el precio de esta unidad en particular es algo elevado: el vendedor pide 3.963.000 pesos, cuando de acuerdo a Mercado Libre el precio del Civic de esta generación en particular oscila entre 2 y 2,6 millones. Lo cierto es que estamos quizás ante un ejemplar único por su estado y origen, eso nadie puede negarlo.

La novena generación del Honda Civic en el mercado argentino

Si hacemos un breve repaso por la historia de esta generación del Honda Civic en nuestro país, llegó en 2012 para reemplazar a la octava generación, que había marcado un nuevo rumbo en términos de diseño, con un aspecto más deportivo y personal, algo que los modelos precedentes no tenían.

En el caso de la novena, mantenía ese estilo agresivo en la trompa, pero quizás había cierto divorcio con la cola, que presentaba un diseño un poco aburrido e insulso, similar a la variante que se comercializaba en Asia. Cabe destacar que esta generación se ofreció en Argentina en carrocería sedán, mientras en otros mercados existía un hatchback, una coupé y hasta una rural.

Por su parte, en el interior de este Honda Civic se mantenía la estructura controversial del tablero dividido en dos, con el tacómetro por un lado (en la zona clásica de la plancha) y un velocímetro digital por encima acompañado de una pantalla que mostraba mucha información pero de una manera poco práctica.

Por su parte, la calidad de materiales y la presentación siempre fueron dos aspectos para destacar en el Honda Civic de esta generación y las que siguieron. El sector superior de la plancha contaba con plásticos “soft touch” que le aportaban una agradable percepción de calidad. Además, el Civic siempre se caracterizó por ser un auto sólido y en el habitáculo era difícil encontrar ruidos de encastres.

En Argentina siempre se comercializó con el mencionado motor 1.8 de 140 CV, que en principio se acoplaba a una caja manual de quinta (con una opción automática y la misma cantidad de relaciones), mientras que más adelante en 2014 pasó a ofrecer una de seis velocidades, saldando una deuda pendiente de generaciones pasadas.

A nivel comportamiento, el Honda Civic era un auto con un buen desempeño dinámico (a pesar de que los primeros años no tenía ESP, algo que modificó en 2015), con un ajuste de suspensiones orientado más bien al confort. Por eso en ciudad tenía un andar suave, respaldado por el eje trasero multilink, algo que no todos sus rivales de la época ofrecían.

En definitiva, el Civic siempre se caracterizó por ser un auto correcto y con buenas prestaciones y esta generación en particular no fue la excepción. Aunque muchos prefieren su antecesor (por una cuestión estética), para nosotros es una buena alternativa si buscamos un sedán mediano confortable, con una probada confiabilidad y una mecánica eficiente.