En diciembre de 2022 no solo festejamos el tan anhelado mundial de fútbol si no que, casi como si realmente hiciera falta, revalidamos el mote de ser uno de -sino “el”- polo productivo de pick ups a nivel mundial.

Hagamos un poquito de historia contemporánea. En 1996 Ford comenzó con la producción de la Ranger en Pacheco mientras que Toyota hizo lo propio un año más tarde en 1997 desde Zárate. Más acá en el tiempo, en 2010, Volkswagen se sumó a la movida con la Amarok en Pacheco y finalmente la dupla cordobesa Frontier-Alaskan comenzó a ser producida en el último lustro en la provincia de Córdoba.

A esa movida productora se le sumó un dato clave: las pick ups casi de la mano de los SUVs fueron ganando protagonismo entre los consumidores lo que generó un aumento general de la demanda sobre todo en el hemisferio sur.

Argentina no es la única que produce en el continente, eso está claro, y de hecho en Estados Unidos también se producen “chatas”. A eso sumale que en ese mercado (que en 2022 cerró en 13,6 millones de unidades) el vehículo más vendido es la mismísima F-150.

Pero vayamos a los números de producción y exportación de nuestro país, para poder marca tendencias en números: en 2022, Argentina produjo 279.388 utilitarios livianos, un crecimiento respecto de 2021 del 11,5%. De esas casi 280 mil unidades, 182.615 unidades fueron exportadas, es decir, el 65% de los vehículos comerciales livianos que se produjeron en el país se mandó a diferentes mercados.

Ahora bien. De lo que queda en Argentina, ¿cuánto se vende? Volvamos a 2022, un año que cerró con 407.000 patentamientos. Durante esos 12 meses las pick ups tuvieron un marcado protagonismo, especialmente las medianas. Partiendo de la base que la Toyota Hilux fue el tercer vehículo más elegido por los argentinos (quedó a mil y monedas del segundo), la Volkswagen Amarok cerró una gran temporada con el cuarto puesto en la general y un poco más relegada entró la Ford Ranger. Nissan Frontier cerró con 7.000 unidades (un crecimiento del 30% acumulado interanual) mientras que su prima Renault Alaskan cerró con 4.400, una suba del 11% interanual. La S10, otro de los grandes productos del segmento de pick ups de origen brasileño, terminó con casi 3.000 unidades.

Independientemente de las medianas, a eso se le suma otro mercado en auge: el de las compactas. En lo que va de 2023 Oroch y Maverick fueron acomodando sus stock y eso puso en jaque a la Toro, histórica referente del segmento. A eso se le suma la llegada de la Montana en breves meses que hará que esa franja se ponga muy pero muy picante y no me quiero olvidar, volviendo al producto del óvalo, que la Maverick llegará híbrida, abriendo un nuevo capítulo en la historia de estas pick up más lúdicas.

2023 posiblemente sea un año álgido con nuevas activaciones, nuevas generaciones nacionales (Ranger debería lanzarse en algún momento del segundo semestre y Hilux con la nueva GR) y varias novedades que seguramente desconocemos. Así las cosas, y con un mercado que tiene un potencial enorme (¡nos encantarían más full size!) Argentina tiene muchísimo handicap en eso de producir y consumir las mejores pick ups a nivel global.