Dentro de los tantos fenómenos particulares que tiene el mercado argentino, hay uno del cual se habla poco: en una familia de dos autos que parten de la misma plataforma, la diferencia de ventas entre ambos es abismal y contraria a la que podría suponerse años atrás.

Es que dentro de la gama Fiat, el Cronos es el auto más vendido de Argentina y eso ya no sorprende a nadie. Pero al mismo tiempo, su hermano hatch, el Argo, en febrero ni siquiera figuró entre los 50 modelos más patentados del mes.

Este particular suceso de que el sedán de un determinado modelo vende mucho más que el hatch tiene una explicación que va de la mano con el contexto actual del mercado. Mientras el Fiat Cronos se fabrica en la planta de Ferreyra, Córdoba (único lugar donde se produce), el Argo proviene de Brasil y eso lo afecta directamente en la disponibilidad de unidades, por el simple hecho de que dada la situación actual Fiat no puede importar libremente unidades de su hatch para el segmento B.

Esto, entre otras cosas, produce que cuando un cliente entra al concesionario y pregunta por un Argo, posiblemente el vendedor le ofrezca el Cronos como una alternativa similar pero con mayor capacidad de baúl y un as bajo la manga: la tan codiciada entrega inmediata.

Pero antes de irme por las ramas, voy a volver al título de esta nota. Si el Cronos vende tan bien porque, además de sus atributos conocidos, puede tener disponibilidad en los concesionarios, ¿por qué no fabricar el Argo en Ferreyra y así asegurar stock e impulsar sus ventas?

Antes que salten las críticas, este análisis es meramente subjetivo y por supuesto que no todos estarán de acuerdo. Pero dada esta situación, que años atrás hubiese sido impensada, me pareció interesante de tratar.

Cuando Fiat realizó una importante inversión en la planta donde hacía los viejos Palio y Siena, pensó en la producción de un modelo “monoalocado”, es decir que sólo se fabrique en ese lugar. Es sabido que radicar más de una plataforma en una línea de producción requiere mayor dinero y quizás ahí está la principal razón por la cual no tenemos un Argo nacional. Porque simplemente sería más costoso y al mismo tiempo no le sería rentable a la compañía ya que estaría obligada a recortar producción de un modelo para fabricar el otro.  Además, el Argo ya se hace en Brasil, con lo cual su producción local únicamente serviría para abastecer el mercado interno.

Pero ya saliendo un poco de ese tema, con la actual fusión de FCA con PSA llamada Stellantis, este gran coloso automotor tiene en Argentina un caballito de batalla dentro del segmento B de hatch que vende muy bien: el Peugeot 208, que casualmente también se fabrica en Argentina al igual que su “primo lejano”, el Cronos. De esta forma, en el hipotético caso de producir un Argo en Córdoba, el desempeño comercial del 208 (modelo del mismo segmento) estaría en juego. Igualmente, en lo que respecta a producción y exportación por el momento cada empresa (ex FCA por un lado y ex PSA por el otro) maneja su propia balanza comercial.

En definitiva, si desde el vamos Fiat hubiese optado por producir sólo el Argo en la planta de Ferreyra y dejarle el Cronos a Brasil, quizás estaríamos viviendo el mismo fenómeno pero al revés, algo que años anteriores era más común que sucediera. ¿Cuántos modelos se vendieron mucho más en carrocería hatch que en sedán? Ejemplos que se me vienen a la mente ahora: Clio, 207 Compact, 307, etc.