La octava generación de la Toyota Hilux se lanzó al mercado en 2015 y desde entonces no tuvo grandes cambios estéticos, más allá de diferentes rediseños (uno en 2017 y el más reciente en 2020). Sin ir más lejos, la próxima generación está a la vuelta de la esquina pero en algún lado de Japón, su lugar natal, un taller diseñó un kit visual para darle un look diferente a la pick up mediana.
Se trata de GMG Double Eight, que ofrece en su taller un paragolpes hecho a medida que le da a la Hilux un aspecto similar a su hermana más grande, la nueva Tundra. De esta forma, aquellos usuarios que quieran darle a su pick up una apariencia más guerrera (y están en Japón) pueden hacerlo con este kit estético que afecta a las partes “blandas” de la trompa.
Lo curioso es que si bien se trata de un trabajo “after market”, a simple vista tranquilamente podría pasar como un rediseño de la Toyota Hilux actual. El resultado final, como ves en imágenes, hace que la Hilux luzca como una “mini Tundra”.
Donde más se impone el look símil full size es en la parrilla, que exhibe un entramado similar de octágonos y el nombre Toyota exhibido como mascarón de proa. Además, la misma luce tres luces de posición de color naranja, algo que también se remite a las camionetas más grandes que se comercializan en Estados Unidos.
Por su parte, por debajo de las ópticas se destacan nuevas tomas de aire que están conectadas de manera vertical con las mismas, mientras que en el capot se aprecia otra toma de aire colocada sobre el capot original. De más está decir que es simplemente estética y no cumple ninguna función.
El resto de la carrocería de la Hilux no presenta cambios con este “body kit”. Solo se pueden mencionar las molduras en los guardabarros, que le imprimen más agresividad a los laterales y contribuyen con ese aspecto más robusto visualmente.
Por último, remata el exterior un juego de llantas de aleación oscurecidas y de mayor diámetro con neumáticos preparados para salir del camino gracias a un dibujo bien guerrero, sumado a la presencia de un kit de elevación para aumentar el despeje y de esa forma mejorar las credenciales a la hora de salir de la ruta.
Cabe mencionar que estas modificaciones visuales no incluyen novedades en lo que respecta al motor. En Japón la Hilux se ofrece con un motor 2.4 turbodiésel de 150 CV, pero en otros mercados también está disponible el conocido 2.8 de 204 CV y 500 Nm de torque. Todo indica que el kit puede utilizarse en cualquier versión de la Hilux, incluso las Gazoo Racing.
Respecto del precio, como mencionamos al comienzo se trata de un proyecto desarrollado por un taller japonés, y el valor del kit completo es de 388.000 yenes, que equivalen aproximadamente a 2.700 dólares. Todos los componentes se venden por separado y sin pintar, para que el usuario puede darles el color a elección.