Tras presentar el rediseño de la cuarta generación del Ford Focus en Europa, la marca de Detroit se prepara para hacer lo propio en el mercado asiático, más precisamente en China. Prueba de esto es que ya se filtraron las primeras imágenes del rediseño, que además presenta algunos cambios respecto del modelo comercializado en el Viejo Mundo.

Si bien todos los paneles de la carrocería son similares a los del Ford Focus que se presentó en Europa en octubre del año pasado, la versión china exhibe una trompa diferente con modificaciones en el paragolpes y la rejilla inferior, que tiene algunas reminiscencias con el nuevo Evos.

Si hablamos de las versiones, al igual que en Europa habrá un Ford Focus ST Line que apelará a un estilo más deportivo, pero también se sumará una variante S Edition con un tratamiento sport más sutil, sobre todo en la zona inferior de la trompa. Mientras tanto, en el sector posterior las modificaciones se limitan aun spoiler rediseñado.

En términos de dimensiones, el Ford Focus hatchback tiene 4,40 metros de largo, mientras que el sedán incrementa la longitud hasta los 4,66 metros. Por su parte, la distancia entre ejes es similar en ambas siluetas (2,70 metros). Asimismo, del interior por el momento no se mostraron imágenes, aunque se espera la presencia de una nueva central multimedia con pantalla de 12,3 pulgadas.

Bajo el capot, el Ford Focus “chino” incorpora un motor 1.5 EcoBoost de tres cilindros turboalimentado, que debería mantenerse en la oferta. Tiene 150 CV y se combina tanto a una caja manual de seis velocidades como a una automática de ocho relaciones.

Así las cosas, la cuarta generación del Focus, que llegó a China en 2018 como un modelo global, se actualizará siguiendo el parámetro estético de otros modelos de la marca en aquel mercado. Mientras tanto, en la región del Mercosur la gente de Detroit tiene toda su atención puesta en su nueva estrategia para ofrecer SUV y pick ups en “reemplazo” de siluetas más tradicionales.