Con el test de la nueva Chevrolet Tracker ya realizado (VER PRUEBA), nos pareció interesante comparar todos sus valores de prestaciones contra uno de sus rivales más importantes y que fue pionero en este segmento de los SUV compactos: la Ford Ecosport.

Una de las mayores novedades del producto de GM está bajo el capot. Hablamos del tres cilindros de 1.2 litros de cilindrada y una potencia de 132 CV, entregada a 5.500 rpm. Tiene un torque de 190 Nm a 2.000 rpm y en la versión Premier que probamos se asocia a una caja automática de seis marchas y tracción delantera, dejando en el camino la integral que ofrecía la generación anterior.

Del otro lado, Ford apela a una base más convencional, con el 2.0 GDI aspirado de 170 CV a 6.500 rpm, junto a un par motor de 202 Nm entregados a un régimen más elevado de 4.500 rpm. En este caso utilizamos los valores de la versión tope de gama Storm, con caja automática de seis relaciones y tracción en las cuatro ruedas.

Comenzando con la prueba del 0 a 100 km/h con partida detenida, Tracker marcó un tiempo de 11,1 segundos, apenas 1 décima menos que su rival, que tardó 11,2.

Ganador: Chevrolet Tracker

En el cuarto de milla o los cuatrocientos metros, hubo ventaja del producto del óvalo, que registró un tiempo de 17,3 segundos a una velocidad de 124 km/h, frente a los 17,9 de Tracker, en este caso a una velocidad mayor de 128 km/h.

Ganador: Ford Ecosport

Por su parte, para cubrir el kilómetro la ventaja fue de la Tracker, con una marca de 32,5 a 160 km/h frente a los 33,3 segundos de la Eco, que además llegó a una velocidad de 148 km/h.

Ganador: Chevrolet Tracker

Por último, la recuperación de 80 a 120 km/h. En este caso, la Chevrolet registró un tiempo de 7,6 segundos contra 8,8 de la Ford. En ambos casos la prueba se realizó con la caja en posición Drive.

Ganador: Chevrolet Tracker