Honda CR-V: la probamos a fondo y te contamos cómo le fue en el Master Test

El motor en esta variante de la Honda CR-V es el mismo que ofrecía el Civic en su momento. Un bloque de 1,5 litros con turbo que desarrolla 190 CV y un torque de 240 Nm, sumado a que dispone del sistema Active Shutter Grille, que cierra la toma de aire ubicada tras la parrilla cuando el motor no necesita refrigeración. 

Lo acompaña una caja CVT de siete marchas con opción secuencial de levas al volante y modo Sport (además del ECON). La tracción es “Real Time AWD”, es decir, integral en demanda y se puede monitorear desde el tablero.

Prueba del alce

En la prueba del alce sorprendió el derrotero de la Honda CR-V, muy roladora pero efectiva a la hora del esquive. En esto influyó una puesta a punto del chasis superior a sus rivales, que le permitieron al producto fabricado en Estados Unidos alzarse con una medalla de plata. 

Velocidad máxima: 71 km/h
Puntaje: 24/25

Test de slalom

En este aspecto, siendo la más veterana de la compulsa, la CR-V mostró sus credenciales y todo lo que el motor 1.5 turbo es capaz de entregar, sin desmerecer el correcto funcionamiento de la caja CVT y una dirección muy directa. Merecido primer puesto. 

Mejor tiempo: 13,4 segundos
Puntaje: 25/25

Prueba de frenado 100-0 km/h

Una de las pruebas donde el SUV de Honda no se destacó fue en la frenada. A pensar de un ABS eficiente y un pedal firme, la distancia que obtuvimos la arrastró hasta el quinto puesto. 

Mejor distancia: 41,1 metros
Puntaje: 21/25

Prueba de frenado 100-0 km/h con carga

Un punto a destacar es que con carga la distancia se vio incrementada en 0,7 metros, que le permitieron conservar el puesto que logró en la primera pasada. Sin embargo, nobleza obliga, esperábamos un poquito más de acuerdo a nuestro archivo de pruebas. 

Mejor distancia: 41,8 metros
Puntaje: 21/25

Prueba de sobrepaso 80-120 km/h

Gracias a la contundencia del motor turbo, con una entrega pareja del torque disponible, sumado a la rapidez de la caja CVT, el producto de Honda logró su segunda medalla de oro en el Master Test, que luego repitió en la prueba con carga. 

Mejor tiempo: 6,1 segundos
Puntaje: 25/25

Prueba de sobrepaso 80-120 km/h con carga

Con una de las mejores relaciones peso/potencia del Master Test (8,5 kg/CV), sumado además a que tiene el motor más potente de la compulsa, nuevamente la CR-V coronó una medalla dorada en la prueba de recuperación con carga. 

Mejor tiempo: 7,2 segundos
Puntaje: 25/25

Puntaje promedio pruebas: 141/150

Evaluaciones adicionales (puntaje máximo 10): 
Motor: 9,5
Transmisión: 8,5
Comportamiento dinámico: 10
Confort de marcha: 9
Prestaciones: 10
Consumo/Autonomía: 9
Dirección: 9
Equipamiento de seguridad: 9,5
Equipamiento de confort: 9
Multimedia/instrumental: 9
Calidad/terminación: 10
Posición de manejo: 9,5
Visibilidad: 7
Habitabilidad: 9
Baúl: 10

SUBTOTAL: 138/150

RESULTADOS FINALES

Pruebas dinámicas: 141/150
Boletín auto test: 138/150
Honda CR-V puntaje Master Test: 279/300

DESCRIPCIÓN DE PRUEBAS 

TEST DE SLALOM 

Consiste en el clásico esquive virando siempre de izquierda a derecha alternativamente. Se colocan 10 conos separados por 20 metros y se ingresa desde 0. No se frena en ningún momento y se va regulando el acelerador para evitar la pérdida de trayectoria y, en el caso de los automáticos, retener el cambio, una acción que no todas las cajas lo permiten. En este caso, se comprueban la eficiencia de la tracción, la respuesta de la dirección, la torsión del chasis y la puesta a punto de los esquemas de suspensiones a la hora de exigir a cada vehículo. Se realiza con todas las cajas en posición D y el modo Sport activado, en caso que la unidad lo permita.

PRUEBA DEL ALCE

Nacida en Suecia en los años ’70, se trata del clásico trayecto con conos que simula el esquive de un obstáculo en ruta de dos carriles. En el ejercicio, el vehículo debe cambiar de trayectoria en una distancia corta, poniendo a prueba la torsión del chasis ante una respuesta rápida sobre la dirección sin acelerar. La maniobra, medidas y disposición de los conos responden a la última actualización, la ISO-3888-2 (segunda edición), editada el 15 de marzo de 2011 en su país de origen, y se mide por velocidad de entrada al trayecto, que promedia entre 60 y 75 km/h.

FRENADO 100-0 KM/H (CON Y SIN CARGA) +300 KG

Con partida detenida y dos ocupantes, piloto y copiloto, se acelera hasta los 100 km/h y se mantiene esa velocidad hasta ingresar a la hilera de conos, separados cada 10 metros. Allí se aplica un frenado firme hasta que el vehículo se detenga por completo. Nuestro equipo de medición lo hace fácil gracias a una función que indica el momento exacto cuando se alcanzan los 100 km/h mediante el GPS, y no tomando en cuenta la velocidad que marca el instrumental del vehículo, que suele ser errónea. La misma prueba se realiza también con tres ocupantes en plazas traseras y el baúl cargado a tope, lo que suma unos 300 kg de peso extra.

SOBREPASO 80-120 KM/H (CON Y SIN CARGA)

Es la clásica maniobra de sobrepaso que se suele aplicar en plena ruta, por ejemplo, cuando se intenta adelantar a un camión. En este Master Test, cuatro SUV en fila india circulan a 80 km/h con una distancia de unos 3 a 4 metros aproximadamente entre sí. El último coloca el guiño anticipando la maniobra y acelera a fondo en el carril contrario hasta superarlos y alcanzar los 120 km/h. De esta manera, se pone en juego la elasticidad del propulsor y la velocidad de las cajas automáticas a la hora de rebajar una, dos o hasta tres marchas. También se realiza con cinco ocupantes y baúl repleto (+300 kg), y cuanto menor sea el tiempo que demora, mejor será su calificación.  

Guido Tonelli

Periodista, egresado de DeporTEA en 2007. Ese mismo año ingresó a Motorpress Argentina para escribir en la web Auto Plus Digital y en 2009 pasó a escribir y probar autos para la edición impresa. Desde 2018 redacta y prueba para auto test web y papel y representa al medio en salones internacionales, eventos y lanzamientos de la industria automotriz a nivel nacional y regional.

Fanático del WRC, fue bastante ciclotímico con sus autos: primero tuvo un Suzuki Swift GTI, pasó por un Citroen Saxo, volvióa las siglas prometidas en un Seat Ibiza GTi y recaló en dos Peugeot 206 (uno francés y otro nacional) hasta que pudo cumplir el sueño de su vida de tener un Subaru Impreza turbo «azul con llantas doradas, como tiene que ser un Impreza».