Si bien a simple vista parece un hecho de ciencia ficción, ocurrió de verdad. El inédito auto volador denominado “AirCar” completó un vuelo entre dos aeropuertos en Eslovaquia. Se trata de una creación del inventor y diseñador eslovaco Stefan Klein patentada para su empresa Klein Vision.
El día del suceso, Klein voló el AirCar durante aproximadamente media hora desde Nitra hasta Bratislava, haciendo un recorrido total de 75 kilómetros. Estuvo acompañado por otros dos aviones pero pudo llegar a la capital eslovaca sin problemas, lo que significó un verdadero hito para el proyecto.
A nivel estético, a simple vista el AirCar parece un vehículo deportivo que se puede manejar en la calle, pero cuando despega y se lo ve en el aire luce como un pequeño avión. Está equipado con un motor de origen BMW que desarrolla 160 CV y una hélice en la parte trasera, que le permite alcanzar una velocidad máxima de 170 km/h.
Curiosamente, el AirCar puede ser un vehículo rápido también en la calle, donde de acuerdo a su creador se puede estacionar en un lugar común y corriente. Por su parte, la “transformación” a su versión aérea demora dos minutos y medio, y no es necesario que el despegue se realice en asfalto.
Cabe destacar que por el momento el vehículo es meramente un prototipo y hasta ahora fue sometido a más de 40 horas de pruebas de vuelo, con una velocidad crucero de 190 km/h. El objetivo de su inventor es llegar al mercado norteamericano, donde según él hay alrededor de 220.000 propietarios de aviones.
El próximo paso será el AirCar 2, cuya versión de preproducción estará equipada con un motor de 300 CV y tendrá un certificado M1 para circular por la calle. Tendrá una velocidad crucero aérea declarada de 300 km/h, con una autonomía de 1.000 kilómetros. Si bien no entraría en el ranking de los autos más rápidos del mundo, por sus características será considerado único en su clase.
Así las cosas, Klein se encuentra en la búsqueda de inversores para que contribuyan en el desarrollo del AirCar. Todo indica que para clientes finales este particular auto volador debería costar entre 500.000 y 750.000 euros. Vos, ¿te lo comprarías?