Fiat Pulse Abarth Test Drive

Presentación

MARCA: fiat

MODELO: pulse abarth

Reconozco que cuando llegó a mis oídos el proyecto Fiat Pulse Abarth lo primero que pensé fue lo lógico que era su génesis teniendo en cuenta esta moda SUV que se posó sobre la industria hace ya años pero que, por más que cerrara el resultado podía no ser el mejor. Hoy, centenares de kilómetros después de que Fiat nos cediera una unidad pienso cuánto extraño manejar deportivos de pura cepa como este. Nuestras sensaciones a bordo del primer SUV Abarth desarrollado en Latinoamérica, a continuación.

Videos

Características

Creo que podemos acordar que el Fiat Pulse no es el clásico SUV del segmento B: lo veo como un escalón apenas por debajo, en ese subsegmento donde navegan Renault Stepway o Peugeot 2008, por mencionar un par. Muchos pondrán el grito en el cielo diciendo que es un Argo “levantado” pero creo que es un poco injusta esa definición.

Eso, pienso, le jugó a favor a este Fiat Pulse porque con todo el kit firmado por Carlo, se lo ve sólido, bien plantado, ancho y musculoso. Este Abarth suma al Fiat Pulse civil calcos en la zona inferior, espejos rojos, llantas negras de 17” con tapa tipo monotuerca (no lo es) y un detalle en fibra de carbono en la zona del capot y un spoiler en la zona inferior trasera que le aportan mucha guerra. A priori pareciera algo sobrecargado para mi gusto pero el resultado es contundente y, sobre todo, un imán de miradas. Ah, el gris (Strato, para los amigos) que nos tocó en suerte le queda una pinturita, paradójicamente.

No quiero perder mucho tiempo en el equipamiento. Tiene prácticamente todo lo que tiene que tener, incluyendo ADAS (frenado, cambio de carril y luces altas) pero el “prácticamente” se lo atribuyo a los solo cuatro airbags (no lo concibo) y a la falta de un techo solar. Dos perlitas de las cámaras/radares de este Fiat Pulse Abarth: cuando el sol le pega de frente y se encandila, el auto te avisa que las funciones están inhabilitadas. Por otro lado, siempre, pero siempre, hay que desconfiar del control de velocidad crucero y del limitador porque son bastante laxos y se manejan 1 o 2 kilómetros por encima de lo seteado. Al organismo recaudador de multas de tu zona le gusta esto.

En términos de comportamiento hay que hacer un chequeo de todo lo que se recalibró en el Fiat Pulse Abarth: pasaje de marchas (más rápidos y deportivos) y suspensiones (13 % más firmes, la delantera con nueva barra estabilizadora y la trasera 15 % más rígida) que redundan en un 10 % menos de rolido. Todo esto (y algunas cositas más que más adelante ampliaremos) da como resultado un Fiat Pulse Abarth que tranquilamente puede oficiar de daily para cualquiera porque es recontra ambivalente y se banca sin problemas los detonados caminos de nuestra región, una fórmula que creo que le puede cerrar a muchos.

Interior

Adentro del Fiat Pulse Abarth también hay un nivel de personalización interesante con un entorno oscurecido, detalles símil fibra de carbono que garpan y costuras y detalles en rojo. Además, el escorpión está por todos lados: según Fiat hay un total de ¡trece! Me gustó, tiene una buena percepción de calidad y no está sobrecargado.

El tablero del Fiat Pulse Abarth es el que ya manejamos en otros modelos como Toro: es la pantalla de 7 pulgadas personalizable aunque tiene otros “relojes” más adecuados a la temática deportiva que hasta incluye el manómetro del turbo como en su momento el 595. Con el correr de los días encontré poco confortable el apoyabrazos e incluso cuando abrí la tapa para guardar cosas, va rozando con las butacas, algo que me hace ruido. Y hablando de esa zona, un curioso easter egg que indica que ahí se guarda el…papel tissue (?).

El baúl del Fiat Pulse Abarth es correcto, con 370 litros que alcanzan para llevar los petates de un viaje no muy extenso, y allí abajo se ubica el auxilio temporal. La habitabilidad, también correcta para los 2,53 metros que tiene entre ejes.

Confort y funcionamiento

Consumo de combustible

El consumo de combustible del Fiat Pulse Abarth es mejor de lo que esperábamos. El modelo en cuestión registró cifras similares al 1.0 que llevamos a Potrero de los Funes hace algunos años pese al plus de potencia y el incremento de cilindrada.

El Fiat Pulse Abarth consume 5,2; 6,7 y 10,4 litros cada 100 km circulando a 100, 130 km/h y en el ciclo urbano, respectivamente. Con estos promedios, el Pulse Abarth firma una tarjeta mixta de 8,2 litros cada cien kilómetros contra los 9,1 de la variante 1.0: más por menos.

El tanque de combustible se mantuvo inalterado en 47 litros y con estas mediciones vas a poder recorrer 904, 701 y 451 kilómetros, respectivamente con el Fiat Pulse Abarth.

Aceleración, recuperación y frenada

Es un Abarth. Y acelera fuerte. Me gustó mucho el resultado que lograron con todas las modificaciones y, sobre todo, la que nos compete en este apartado: la incorporación del motor 1.3 GSE de 175 CV cadenero que hemos manejado en Compass y Renegade. El T270 es una fruta noble que responde al pedido del pie derecho y eso se ve complementado por el ronroneo del escape que nos invita a acelerar el auto, algo que contados modelos pueden lograr.

Es un bloque muy poco progresivo que cuando circula a baja velocidad corcovea incómodo pidiendo acelerar lo cual está bueno conceptualmente aunque en el día a día quizás no sea lo mejor.

Obviamente llevamos al Fiat Pulse Abarth al Autódromo de la Ciudad y allí le hicimos las pruebas: los resultados fueron muy interesantes, con 8,8 segundos para el cero a cien y un kilómetro en 30,5 segundos que dejaron muy atrás al Renegade Trailhawk que se demoró más de 11.

La caja AT es de seis velocidades y tiene opción secuencial pero honestamente a esta altura las veo más de adorno que otra cosa salvo que uses el Fiat Pulse Abarth en un track day. Sí la noté algo perezosa en los kick down, donde la caja se tomó su tiempo para ubicar el cambio correcto.

Como dije antes, disfruté mucho manejar este Fiat Pulse y me dieron ganas de pisarlo todo el tiempo. Completo lo que me quedó pendiente de las nuevas calibraciones con lo que sucede cuando se aprieta el botón Poison que es una manera muy original de llamar al tradicional Sport: dirección más pesada, activación del Dynamic Torque Vectoring (distribuye el par a las ruedas en curva), la calibración de la caja y los controles de tracción y estabilidad se vuelven menos intrusivos. Además se pone un poquito más ronco, cosa que me encanta.

Lo único que fue para atrás en comparación con el Fiat Pulse tradicional fue la frenada, que empeoró: pasó de los sobrenaturales 37,9 a más lógicos 39,9. Me sorprendió que pese a su tesitura deportiva el eje trasero no tiene discos ni suspensión independiente como plus.

Ficha técnica

Pack de conectividad

La multimedia del Fiat Pulse Abarth corre por cuenta de una pantalla de 10,1” con el sistema Uconnect que siempre me gusta decir que es uno de los mejorcitos de la industria. La conectividad con el celu es inalámbrica y me gustó mucho cómo sonaba. A la hora de las cargas, puertos USB tradicionales, tipo C e inalámbrica para que cada uno vaya a tope de bateria.

Fotos

Seguridad

Opiná sobre este modelo

Guido Tonelli

Periodista, egresado de DeporTEA en 2007. Ese mismo año ingresó a Motorpress Argentina para escribir en la web Auto Plus Digital y en 2009 pasó a escribir y probar autos para la edición impresa. Desde 2018 redacta y prueba para auto test web y papel y representa al medio en salones internacionales, eventos y lanzamientos de la industria automotriz a nivel nacional y regional.

Fanático del WRC, fue bastante ciclotímico con sus autos: primero tuvo un Suzuki Swift GTI, pasó por un Citroen Saxo, volvióa las siglas prometidas en un Seat Ibiza GTi y recaló en dos Peugeot 206 (uno francés y otro nacional) hasta que pudo cumplir el sueño de su vida de tener un Subaru Impreza turbo «azul con llantas doradas, como tiene que ser un Impreza».