Rápido y Furioso: el Toyota Supra de Paul Walker se subastó por una cifra récord
El auto original utilizado por Brian O’Conner en la primera entrega de la saga se vendió en una cifra que lo convirtió en el Toyota Supra más caro de la historia. Mirá lo que pagaron por él.
El pasado 20 de junio se llevó a cabo en Las Vegas la subasta del Toyota Supra utilizado para filmar dos entregas de la saga de Rápido y Furioso. La misma unidad que manejó en varias escenas Paul Walker se encuentra en impecable estado y el valor de la venta alcanzó una cifra récord para un Toyota Supra.
Por la suma de 550.000 dólares, un fanático tuvo la suerte de llevarse a su casa el auto original de una de las películas más vistas por quienes gustan de la velocidad y los motores. Además, la cifra alcanzada en la subasta lo convirtió en el Supra más caro de la historia hasta el momento.
Entre las modificaciones legítimas que se pueden apreciar en la unidad subastada está la pintura exterior, con un color naranja muy llamativo que a lo largo de los años fue replicado por miles de fanáticos de la saga. A eso se suman el kit de carrocería con alerón y faldones laterales, además de las llantas de 19 pulgadas con cinco rayos.
Puertas adentro, también es todo 100% original, donde se destacan el volante deportivo, los tapizados azules en las butacas y los paneles de puerta y los tres medidores extra ubicados en el extremo derecho de la plancha de instrumentos.
Bajo el capot de este Toyota Supra de 1994 se encuentra el conocido motor denominado 2JZ-GTE, que con 3 litros de cilindrada eroga una potencia estimada de 320 CV. Lo que generó controversias fue la transmisión, ya que originalmente se trataba de una automática de cuatro marchas, pero la palanca fue modificada para parecer una caja manual.
Otro dato curioso es que esta misma unidad también fue utilizada para la grabación de la segunda entrega de la saga, “2 Fast 2 Furious”, siendo uno de los autos que compiten contra Brian O’Conner en la primera carrera de la película.
Luego del rodaje, el taller donde se realizaron las modificaciones regresó a su condición original al Supra, tal y como fue subastado. Asimismo, el afortunado propietario recibió junto a la flamante unidad, un certificado de autenticidad y toda la documentación original del auto.