noticias |

Solo 46.000 km en más de 40 años: se vende una de las primeras Renault Fuego en impecable estado

Te mostramos los detalles de una impecable Renault Fuego de 1983 con muy pocos kilómetros y que se encuentra 100 % original.

Renault Fuego GTX 1983 trasera

La Renault Fuego fue un modelo que caló hondo en el público argentino y que desde su presentación en la década del 80 se convirtió en uno de los autos más deseados del mercado. Quizás por eso siempre da gusto encontrar una unidad inmaculada en la actualidad, cuando ya pasaron más de 40 años desde su llegada.

Te puede interesar:

25 años tapada de polvo y telarañas: la increíble historia de esta Renault Fuego GTA Max

Completamente original con 46.600 kilómetros de fábrica”: así anuncian a esta flamante Renault Fuego de 1983 que se encuentra a la venta. Y si las fotos te suenan es porque se trata de la misma unidad que estuvo exhibida en el stand que montó la marca este verano en Cariló.

Renault Fuego GTX 1983 frente

Creo que las fotos hablan por sí solas: el estado de esta Fuego es impecable, sin detalles ni golpes en la pintura y con un interior que no presenta síntomas de desgaste y uso excesivo. Además, esta unidad tiene la particularidad de que es una de las primeras que se fabricaron en el país.

Quizás el punto más cuestionable de la venta de esta Renault Fuego con menos de 50.000 kilómetros de fábrica es su precio: 22.000 dólares parece una suma elevada sobre todo cuando analizamos lo que podemos comprar en el mercado de usados con esa plata. Pero queda claro que por las características de la unidad posiblemente estamos ante la mejor Renault Fuego a la venta, y eso tiene un valor agregado.

Renault Fuego GTX 1983 interior

Historia de la Renault Fuego

La Fuego era esencialmente una coupé basada en el Renault 18 que causó gran revuelo cuando se presentó a principio de la década del 80. Primero llegó importada desde Francia pero un año más tarde, en 1982, inició su producción en la planta cordobesa de Santa Isabel, que hace poquito celebró 70 años de trayectoria ininterrumpida.

Renault Fuego GTX 1983 trompa

Estéticamente la Fuego era muy llamativa y su aspecto era un verdadero imán de miradas cuatro décadas atrás. Imaginemos un contexto donde el público estaba acostumbrado a siluetas bien cuadradas y aburridas cuando apareció este aparato que parecía de otra época. La Fuego estrenaba algunas innovaciones en aquellos años como los paragolpes envolventes de plástico, que por primera vez estaban en un auto de producción nacional.

Te puede interesar:

El dispositivo que estrenó la Renault Fuego en la década del 80 y que hoy no puede faltar en ningún auto 

Si bien en Europa hubo un amplio abanico de versiones y motorizaciones (hasta una turbodiesel), en nuestro mercado la Renault Fuego solo se comercializó en versión full GTX, inicialmente con el motor 2 litros similar al del Renault 18, pero con algunas modificaciones que incrementaban la potencia hasta los 103 CV, mientras que la caja era manual de cinco marchas.

En 1987, Renault mejoró su coupé “deportiva” al presentar la versión 2.2, que alcanzaba 116 CV y le permitían alcanzar una velocidad máxima de 193 km/h y acelerar de cero a cien en 9 segundos. Esta variante incorporaba frenos a disco traseros como novedad.

En 1988, la Renault Fuego recibiría una importante actualización estética con la versión GTA. La coupé presentaba nuevos paragolpes, zócalos y molduras en color carrocería, así como también faros traseros oscurecidos. Estas novedades contribuyeron a consolidar el liderazgo de la Renault Fuego en su segmento en Argentina.

La Renault Fuego continuó evolucionando en los años siguientes, y en la década del 90 llegó la versión GTA Max, que incrementaba la potencia del motor hasta los 123 CV, acercándose a los 200 km/h de velocidad máxima. La variante también presentaba cambios estéticos y novedades en el interior, como un nuevo volante de mayor grip.

En septiembre de 1992 Renault finalizó la producción de la Fuego, luego de fabricar casi 20.000 unidades. Esta emblemática coupé no solo había tenido éxito comercial sino también deportivo (un tal Juan María Traverso tuvo mucho que ver) y marcó a fuego -valga la redundancia- la industria automotriz nacional.

La rivalidad entre Renault Fuego y Ford Sierra

Si bien eran dos segmentos y filosofías diferentes, en la década del 80 la Fuego y la coupé del Ford Sierra protagonizaron una gran rivalidad en las pistas, que luego se trasladó a la calle. Para hacer este informe fuimos al archivo y encontramos nada menos que una suerte de comparativo que escribió Figueras (probó ambos modelos exhaustivamente) hace unos años y esto es lo que decía:

La gran diferencia estaba centrada en la tracción y suspensiones. Sabido es que los autos de competición más radicales ‘empujan’ no ‘tiran’ o sea que la potencia se transmite al eje posterior como en el caso de la XR4 y no al delantero como en la Fuego. Lo mismo vale para las suspensiones traseras: a ruedas independientes en la Ford, rígida guiada en la Renault.

Este dato es importante porque hacía al comportamiento dinámico de ambas. La XR4, a pesar de contar con un motor que también equipaba distintas versiones del Taunus, manifestaba sus virtudes mediante un desempeño impecable en curvas con una tendencia a sobrevirar si se la manejaba bajo alta exigencia.

En síntesis, además de franca y previsible era divertido conducirla. La Fuego, en cambio, al aplicar la potencia sobre el tren delantero se comportaba de manera inversa o sea era subvirante obligando dosificar el acelerador en los virajes para mantener la trayectoria deseada”.