Ícono entre los todoterreno si los hay, el Toyota Land Cruiser es un emblema para los fanáticos de salir del camino en busca de aventuras. Nació como un vehículo 100% rústico para ser utilizado por las fuerzas militares, pero el tiempo lo convirtió en un SUV confortable y lujoso, atributos que conserva hasta el día de hoy en su generación actual.

Pero en esta oportunidad encontramos una unidad muy particular ya que el hecho de que se trata de un Toyota Land Cruiser de los 90 con bajo kilometraje es todo un suceso. Decimos esto porque por su robustez, confiabilidad y capacidades, no es raro hallar una unidad similar a la que ves en imágenes con más de 400.000 kilómetros recorridos.

Los Land Cruiser de todas las generaciones son vehículos pensados para durar lo máximo posible, pero la unidad en cuestión acusa un kilometraje de apenas 4.660 millas (unos 7.500 kilómetros). Esto lo convierte en un verdadero “rara avis” y quizás por eso alguien desembolsó la módica cifra de 165.000 dólares para llevárselo a su casa.

El ejemplar es de la generación denominada FZJ80 del Toyota Land Cruiser, que se presentó a principios de 1990. Estéticamente luce un innegable look noventoso, con líneas más bien cuadradas pero que transmitían la solidez característica de estos modelos. Por su parte, los paragolpes de color gris y los detalles dorados en varias insignias evidencian que se trata de alguna versión especial ofrecida en el mercado de los Estados Unidos.

El encargado de mover este SUV de Toyota es un motor de seis cilindros en línea con 4,5 litros y una potencia de 212 CV. Denominado internamente como 1FZ-FE, es un bloque reconocido por su durabilidad y confiabilidad, y como prueba de eso hay registros de varias unidades con este impulsor que superaron el medio millón de kilómetros sin mayores problemas.

La potencia se transmite, como buen Toyota Land Cruiser, a las cuatro ruedas mediante una caja automática de cuatro velocidades, que no descolla por su modernidad ni rapidez pero que, al igual que el motor, goza de una probada confiabilidad.

Adentro de este Toyota Land Cruiser queda evidenciado todo el lujo que ofrecía el modelo en aquel entonces. Butacas que parecen sillones, detalles en símil madera distribuídos por toda la plancha y una dotación que incluye regulación eléctrica de ambos asientos delanteros, tapizados de cuero, control de velocidad crucero y techo corredizo como lo más destacado.

No caben dudas de que 165.000 dólares es un precio elevado para un SUV con 26 años de antigüedad, pero al parecer es un valor que alguien estuvo dispuesto a pagar y al fin y al cabo nadie puede negar que se trata de un ejemplar interesante por su estado de conservación y kilometraje.