Encontrar una agencia con deportivos valuados en miles de dólares cubiertos en polvo no es algo que se vea todos los días. Sin embargo, un joven fotógrafo llamado James Wan se topó en un concesionario abandonado de Guangzhou, China, con un inventario de rodados interesante, incluyendo un ejemplar muy particular.

Los tres autos que ves en las imágenes son: un Corvette C5 Z06, un Ferrari 575 Superamerica, y un exótico Porsche Carrera GT, del cual se fabricaron apenas 1.270 ejemplares en todo el mundo.

Según explicó el autor de las fotos a el sitio Periodismo del Motor, el lugar comenzó su vida como una agencia de Ferrari y Maserati, pero luego la marca italiana se desvinculó del mismo, y se empezaron a vender modelos de otras marcas, como el Porsche y el Corvette.

Debido a una fuerte caída en el consumo de este tipo de vehículos, el concesionario terminó cerrando sus puertas en el año 2012, y estos tres ejemplares quedaron sin venderse y abandonados “a su suerte”.

En el caso del Porsche Carrera GT, es uno de los modelos más especiales fabricados por la marca alemana y además, la unidad en cuestión color rojo metálico, es una de las únicas tres fabricadas en ese color específico. Porsche produjo un total de 1.270 unidades del Carrera GT, entre los años 2003 y 2006.

Este superdeportivo tiene un motor V10 en posición central de 5.7 litros y 612 CV, con un torque de 590 Nm, asociado a una caja manual de seis marchas. Puede alcanzar 330 km/h de velocidad máxima y acelerar de 0 a 100 en 3,9 segundos, gracias a un peso de tan sólo 1.380 kilos, valor más acorde a un sedán mediano que a un deportivo de más de 600 CV.

Algo en lo que se destacaba el Carrera GT era en la falta de ayudas electrónicas, ya que no tenía control de estabilidad. Los fanáticos de Rápido y Furioso tal vez lo recuerden como el auto en el que murió Paul Walker, ya que el actor de la exitosa saga iba de acompañante en una unidad similar, junto a su amigo Roger Rodas, aquel 30 de noviembre de 2013 cuando ambos perdieron la vida en un fuerte accidente en Los Ángeles.

Pero volviendo a la unidad en cuestión es la número 1.255, y contaría con un total de 4.580 kilómetros en su odómetro. Luego de ocho años, sigue esperando a que algún afortunado llegue con ganas (y dinero, claro) para sacarlo de allí y regresarlo a la vida. Vos, ¿te animarías a manejarlo?