Nuevo SUV: así se actualizó uno de los principales rivales de Toyota RAV4

Kia presentó en el último Salón del Automóvil de Los Ángeles al nuevo Sportage. En realidad no es “nuevo” porque estamos ante el rediseño de la quinta generación, presentada a nivel mundial en 2021.

Luego de su debut en Corea del Sur, ahora Kia muestra la versión del SUV para el mercado norteamericano, que tiene pequeñas y sutiles diferencias con respecto a la variante pensada para Asia, que a su vez es la misma que llega a nuestra región. A las novedades estéticas se suman mejoras a nivel mecánico y también tecnológico.

Cuáles son los cambios afuera

Las principales modificaciones en el diseño exterior aparecen en la trompa para alinearla con la última corriente de estilo de Kia, donde se destacan las ópticas en posición vertical con una nueva parrilla que puede variar su diseño según el nivel de equipamiento.

El lateral permanece sin cambios salvo por las nuevas llantas, que también varían su aspecto de acuerdo a la versión. Por ejemplo, la variante X-Line viene con llantas de 19’’, mientras que hay otra orientada a un uso más todoterreno que viene con 17’’ y un perfil de neumático más elevado.

Por último, atrás los cambios se limitan a retoques en el paragolpes y las ópticas, que conservan el formato de la serie anterior. En líneas generales, son pequeños cambios pero que sirven para modernizar a un SUV que ya de por sí tenía un diseño atractivo y bien proporcionado, al menos a modo personal.

Las dimensiones no se modificaron porque la plataforma es la misma. El Kia Sportage se ofrece según el mercado con dos largos de carrocería y una longitud que oscila entre 4,51 y 4,66 metros, mientras que la distancia entre ejes puede ser de 2,68 o 2,75 metros. Al mercado local y a Estados Unidos llega la versión “larga”.

Adentro

Este Kia Sportage ‘MY2025’ estrena novedades más importantes en el interior, donde el cambio más importante es un volante que ahora es de dos rayos e incorpora más comandos. También se reubicaron las salidas de aire y como ya sucedía en el modelo anterior, se pueden elegir varias combinaciones de colores y texturas para la plancha y los tapizados.

A la hora de los comandos, Kia conserva en esta actualización algunas teclas físicas a pesar de que la tendencia va en sentido contrario. Respecto de la multimedia, la pantalla central es de 12,3’’, lo mismo que el instrumental, digital y con diferentes posibilidades de proyectar la información.

Motores

Para esta actualización Kia mantiene una oferta de motorizaciones convencionales y también electrificadas. Por un lado la gama arranca con un 2.5 de cuatro cilindros que produce 190 CV y viene acompañado por una caja automática de ocho velocidades. En Corea también se ofrece el 1.6 turbo con caja automática de doble embrague y siete marchas, que no estará disponible en Estados Unidos.

Norteamérica sí tendrá en cambio una opción híbrida, que se compone por un 1.6 turbo y otro bloque eléctrico que entregan en conjunto 234 CV. En este caso, Kia anunció mejoras en el motor eléctrico que se traducen en mayor potencia, sumado a un sistema de frenado regenerativo que fue optimizado. La transmisión corre por cuenta de una caja automática de seis marchas.

Por último, hay una variante híbrida enchufable que ahora gana 7 CV y alcanza los 272 CV, cifra más que interesante para un vehículo de este segmento y que lo posiciona un escalón por encima del Toyota RAV4, uno de sus principales rivales en el mercado norteamericano.

El nuevo Kia Sportage se comercializará con una gama que incluye versiones LX, EX, SX, X-Line y X-Pro Prestige, entre otras. La tracción integral seguirá disponible como opción tanto para los motores nafteros como la oferta híbrida (la variante enchufable solo es 4×4).

En cuanto al equipamiento, según la versión el SUV puede incluir en su dotación equipo de audio Harman Kardon, asiento trasero con calefacción, cargador inalámbrico y un completo paquete de ADAS, entre otros ítems tanto de confort como de seguridad.

Cuándo llega y precios

El renovado Kia Sportage llegará a los concesionarios de Estados Unidos a partir del segundo semestre de 2025 y por eso todavía no se informaron los precios para ese mercado.