El Fiat Regatta supo ser uno de los sedanes más grandes y lujosos de la marca en nuestro mercado. Sin embargo, como todo intento de la automotriz italiana de posicionar un modelo en segmentos más importantes, el modelo no tuvo el éxito esperado y por eso no es común encontrar unidades en perfecto estado de conservación, mucho menos con bajo kilometraje.

Pero como en auto test tenemos la suerte de tener seguidores que nos mandan sus “joyitas”, en esta ocasión de la mano de Leandro Barrientos, creador de la página @automovilismodelrecuerdo (recomendamos para nostálgicos como nosotros) te mostramos un impecable Fiat Regatta de 1992 con apenas 17.000 kilómetros reales que trae consigo una curiosa historia.

Hola chicos. Este es el Fiat Regatta que adquirimos hace nada con mi gran amigo Federico, ya que nos dedicamos como hobby a la recuperación y puesta en valor de este tipo de autos gracias a la posibilidad que me da Automovilismo del Recuerdo y sus seguidores”.

Con respecto a la unidad, es un Regatta S modelo 1992 color blanco corfú con apenas 17.000 kilómetros reales de fabrica. El vehículo era de gente muy mayor y estaba guardado en Villa Lynch, San Martin. Evidentemente tenían otro vehículo y por razones que no tengo muy claras luego de dos años de uso dejaron al Regatta guardado bajo techo en su garaje particular hasta que aparecimos nosotros.

Entre los detalles para mencionar, conserva las gomas Pirelli P44 de fabrica, el estéreo Philco y parte de los nylon en el respaldo del asiento trasero. Es una auténtica máquina del tiempo. Fue entregado por el concesionario Italfrance SEVEL en Caseros allá por 1992 y se encuentra legalmente reempadronado por nosotros”, contó Barrientos.

Bajo el capot este Fiat Regatta utiliza el conocido motor 1.6 “Tipo”, que en su momento era moderno y una de las mejores alternativas que tenía la marca para sus modelos. Muy ponderado entre los fanáticos de los fierros y las picadas por su desempeño en los Fiat Uno y Duna, en el Regatta repetía su eficiencia y sus 89 CV entregaban buenas sensaciones y prestaciones, con una aceleración de 0 a 100 km/h en el orden de los 13 segundos y una velocidad máxima de unos 170 km/h.

La versión S prescindía de algunos elementos de confort que sí tenía el SC, como por ejemplo aire acondicionado o levantavidrios eléctricos. Sin embargo, el nivel de terminación en el interior era para destacar, en una época donde Fiat ponía esmero en este apartado, incluso en vehículos de segmento inferior como el Uno.

Por último y como dato anecdótico, recurriendo al archivo para realizar esta nota nos encontramos con un memorable operativo realizado por Figueras con tres Fiat Regatta 1.6 hace más de 30 años, donde recorrió la Ruta 40 ¡de punta a punta! totalizando más de 12.566 kilómetros recorridos. Otra de las tantas hazañas que formaron parte de la trayectoria periodística del mejor de todos.