El fenómeno Amarok: la pick up más vendida en enero y la más antigua del segmento
El mes pasado, la pick up más antigua del segmento fue la más vendida. Segundo análisis del fenómeno Amarok en Argentina.
En el primer mes del año la Volkswagen Amarok superó a la Ranger (segunda) y a Hilux (tercera) se convirtió en la pick up más vendida de Argentina. El producto fabricado en Pacheco registró 3.664 patentamientos, y en el caso de la pick up de Ford ese número fue de 3.634 unidades, en un final casi de película.
En auto test ya hemos hablado varias veces de este fenómeno, donde la Volkswagen Amarok pelea frente a rivales más modernos, equipados, seguros y a prácticamente el mismo precio (desde hace un tiempo las pick ups se convirtieron en sus versiones más equipadas en vehículos que superan los 70 millones de pesos).
En 2024 la Amarok tuvo su primer rediseño profundo, que mejoró varias críticas que se le hacían al modelo anterior como la falta de airbags laterales o el sistema multimedia. Pero debido a su antigüedad no pudo incorporar más ayudas a la conducción (ADAS) como prácticamente todos sus rivales, con lo cual en algunas cuestiones todavía está un paso atrás de la competencia.
Acordate que la segunda generación de la Amarok es en realidad una Ranger con otra trompa (comparten motores, plataforma y suspensiones) y en la región Volkswagen decidió no aplicar la misma estrategia que en el resto del mundo, quizás porque por estos pagos (más que nada en Argentina) la pick up fue un éxito de ventas.
Creo que el éxito que tiene Amarok está directamente relacionado con su desarrollo inicial. Como ya contamos en esta nota, cuando Volkswagen presentó en 2010 su primera pick up mediana desarrollada con sus propios recursos, realmente elevó la vara en lo que respecta a seguridad, motorización, posición de manejo y comportamiento dinámico. Y estos últimos aspectos (salvo seguridad) no se modificaron en la última actualización.
Es por eso que hoy, casi 15 años después y tras un polémico rediseño de trompa, la Volkswagen Amarok sigue siendo una de las pick ups más elegidas del segmento, donde compite con rivales más modernos y equipados pero que no son mejores en algunos aspectos, como el comportamiento dinámico o la posición de manejo.
En lo personal pienso que lo mejor que pudo hacer Volkswagen con la Amarok es incorporar a sus filas el motor V6 turbodiésel, que en su momento cuando salió fue todo un suceso. En el camino se sumaron versiones más accesibles (como la Comfortline) y el upgrade de potencia que le permitió a la pick up producida en Pacheco posicionarse como la más potente de su nicho, al menos tomando como parámetro motores diésel.
El éxito de la V6 fue de tal magnitud, que cuando salió la propia gente de Volkswagen esperaba un volumen cercano al 10%, y luego ese volumen pasó a ser del 50 %. De hecho cuando salió el rediseño presentaron la mayoría de variantes V6, y luego sumaron las 2 litros.
Tampoco hay que olvidar la eficiente caja de ocho velocidades, otra característica que cambió completamente el paradigma del segmento, que hasta ese momento ofrecía, como mucho, transmisiones de cinco velocidades. Quizás la única contra de esta caja es que ninguna versión ofrece reductora, algo que condice un poco las capacidades fuera del camino.
Claro que el motor V6 fue una de sus últimas incorporaciones, pero la Volkswagen Amarok tiene ese as bajo la manga que, para mí, fue lo que le permitió estar donde hoy está: su comportamiento dinámico. Desde el vamos, la suspensión fue diseñada de tal forma que los anclajes de los elásticos traseros vayan por fuera de la línea del chasis, y eso se traduce en un aplomo y soltura que hasta ahora ninguna pick up pudo igualar, incluso siendo más modernas.