La Corolla Cross yankee: Toyota presentó el SUV para el mercado norteamericano
La marca japonesa presenta su nuevo crossover en uno de los mercados más grandes del mundo. ¿Cuáles son las diferencias respecto a la variante del Mercosur?
Bajo el slogan “el crossover que no sabías que necesitabas”, Toyota presentó al Corolla Cross en el mercado de los Estados Unidos. Al igual que en nuestra región, el exponente que comparte plataforma con el histórico sedán se posicionará entre C-HR y RAV4.
En términos estéticos, la variante destinada el mercado de los Estados Unidos luce similar a la que se fabrica en la planta brasileña de Sorocaba. Sin embargo, hay algunos detalles sensibles que solo el ojo entrenado notará: las ópticas presentan detalles naranjas, como exigen las normativas norteamericanas.
Por su parte y al igual que el Corolla Cross del Mercosur, las versiones de entrada calzan llantas de 17 pulgadas, mientras que en la tope de gama (llamada XLE en los pagos de Joe Biden) el diámetro es de una pulgada más.
Adentro continúan las reminiscencias con el Corolla, sobre todo en la arquitectura de la plancha de a bordo. Respecto al modelo producido en el país verdeamarelo, los tapizados (al menos en algunas versiones) apelan a tonalidades más claras y un diseño bitono para el torpedo.
Respecto al equipamiento, desde la variante de entrada contamos con central multimedia de 7’’ con sistemas Android Auto, Apple CarPlay y Amazon Alexa, aire acondicionado y computadora de a bordo como lo más destacado, mientras que a medida que subimos en el escalafón encontramos volante revestido en cuero, climatizador automático y cargador inalámbrico para celular.
Como es costumbre en la marca con sede en Japón, todas las variantes incluyen ADAS como el control de velocidad crucero adaptativo, mantenimiento de carril y alerta de colisión. El resto de la gama incorpora alerta de punto ciego y de tráfico cruzado, además de asistente al estacionamiento.
La mecánica corre por cuenta del conocido 2.0 naftero de 170 CV y 200 Nm de torque, que se acopla a una caja automática CVT con diez marchas preseteadas. Sin embargo, en Estados Unidos sí existe la posibilidad de elegir un sistema de tracción en las cuatro ruedas, que a su vez incluye un esquema de suspensión trasero independiente, algo que la versión brasileña no ofrece.
Nació en 1995 y es periodista. Aprendió a manejar a los 12 años en un VW Gol diésel año 2004 cinco puertas. Su primer auto lo tuvo a los 19 años y fue otro VW Gol, pero con motor naftero. Actualmente es propietario de un Gol Trend 2011, aunque su pasión son los deportivos japoneses de los 90 (Toyota Supra, Nissan Skyline, etc).
Desde julio de 2014 se dedica de lleno al mundo de los motores. Ingresó al staff de Motorpress Argentina en septiembre de 2020 y desde entonces se desempeña como redactor de contenidos para la web y papel de la revista Auto Test.