El Divo es la promesa de Bugatti de entregar un auto “de carácter, estrictamente limitado y con una excepcional maniobrabilidad”. Y en esto último la marca hace hincapié ya que afirma que sus clientes le pedían un auto más ágil que el Chiron. Se buscó hacer del Divo un coche menos pesado, para lo que se instalaron elementos como una cobertura de fibra de carbono para el intercooler, llantas más ligeras, un nuevo sistema de audio y una menor cantidad de materiales aislantes. Por otro lado, su imagen, más agresiva que la del modelo original (gracias a nuevos conductos de aire, distintos apéndices o un alerón más ancho) obedece a una optimización de la aerodinámica.

Desde Bugatti confirmaron lo lógico. Le hicieron caso al pedido ya que las 40 unidades del Divo ya fueron vendidas -aun sin estar producidas- a clientes que en su cochera ya tienen, mínimo, un Chiron. El Divo está impulsado por el conocido W16 que desarrolla brutales 1.500 CV y 1.600 Nm. Eso lo lleva a acelerar de cero a cien en 2,4 segundos. La velocidad máxima está limitada a 380 km/h.

El desarrollo en pista comenzó hace un año. Se recorrieron 5.000 km y para alcanzar la mejora dinámica se trabajó en alivianar los pesos (es 35 kg más liviano), mejorar la carga aerodinámica (+90 kg), modificar los pasarruedas en ambos ejes y se endurecieron las suspensiones con un balance orientado al eje delantero.