La industria automotriz a nivel global está afectada por la escasez de semiconductores (también conocidos como microchips), que son vitales en la fabricación de un auto. Además, cuando un vehículo posee un nivel de equipamiento más sofisticado, la demanda de chips es mayor. Por eso, en algunos mercados hay marcas que apuestan por modelos básicos con un nivel de dotación impensado para los tiempos que corren.

Hace unas semanas, la fabrica rusa AvtoVaz reanudó la producción del Lada Granta, cuya fabricación había sido detenida en el marco del conflicto entre ese país y Ucrania. Y en ese contexto, sumado a la crisis de semiconductores que se vive en todo el mundo, acceder a piezas no es tarea fácil.

De esta forma, el Lada Granta vuelve a ser producido en Rusia con una nueva versión “básica” denominada Classic. En materia de equipamiento, se eliminaron dispositivos de seguridad que hoy en día son obligatorios por ley en varios mercados (como el nuestro) como los airbags y el sistema de frenos ABS.

Como contrapartida, en un comunicado oficial la empresa anunció que su modelo cuenta con dirección eléctrica, levantavidrios eléctricos delanteros, ganchos Isofix para sillas infantiles, computadora de a bordo, cierre centralizado y equipo de audio con cuatro parlantes.

Bajo el capot, este particular modelo incorpora un motor 1.6 de ocho válvulas con 90 CV (muy similar al que utilizaba el primer Renault Logan) que se acopla a una caja manual de cinco velocidades. Según la marca, se trata de un motor “confiable y de bajo consumo de combustible”.

Por el momento solo se mostró una versión sedán de este exponente, pero se estima que más adelante llegarán variantes con carrocería tipo liftback y una rural. Estas configuraciones ya eran ofrecidas por el Lada Granta desde su llegada al mercado ruso en 2011.

Maksim Sokolov, presidente de la empresa AvtoVaz, declaró: “Hoy, después de una larga parada, AVTOVAZ reanudó la producción de automóviles. Garantizar el empleo del personal de la planta de automóviles es una de las principales prioridades que tenemos. Y, por supuesto, tenemos que seguir produciendo los automóviles más populares y asequibles del mercado ruso, que no dependen de la escasez de componentes importados. Para ello, la empresa, junto con las autoridades federales y regionales, participan activamente en el desarrollo de competencias de los proveedores rusos”.