Un Citroën 2CV que se vendió por un precio récord de 210.000 euros (equivalentes a unos 225.000 dólares) se convirtió en el más caro de todos los tiempos y además presenta una particularidad: su carrocería está fabricada totalmente de madera, lo que le permitió superar el récord anterior del 2CV más caro de la historia por bastante diferencia.

Esta unidad tan particular que llamó la atención de todos estuvo disponible en una subasta llevada a cabo cerca de la ciudad de Tours, en Francia. Su creador utilizó madera procedente de diferentes árboles frutales (cerezos, manzanos y perales) y se inspiró en un Citroën 2CV de 1955, uno de los autos más emblemáticos de la marca francesa.

El auto es fruto de un exhaustivo trabajo de Michel Robillard, que comenzó el proceso de fabricación hace más de 10 años, en 2011. En todo este tiempo el artesano trabajó durante unas 5.000 horas, algo que se ve reflejado no sólo en el exterior, sino también puertas adentro, donde diferentes componentes como tablero y volante están hechos de madera.

Claro que algunos elementos son heredados del 2CV “original”, como los tapizados de tela (pese a que los armazones de los asientos son de madera) y la clásica capota de lona que miles de usuarios del 2CV supieron disfrutar, sobre todo en los días primaverales.

Algo curioso que no deja de ser interesante es que Robillard utilizó el motor de un Citroën 3CV para construir este particular auto. Esto quiere decir lógicamente que el vehículo puede circular por sus propios medios (alcanza una velocidad máxima de 80 km/h) gracias a un motor bicilíndrico de 602 cm3 refrigerado por aire. Por su parte, el chasis viene de un Dyane de 1969 (que compartía varios componentes con el 2CV original).

Sobre el nuevo comprador, que desembolsó una suma impensada para un Citroën 2CV, se llama Jean Paul Favand y es ni más ni menos que el fundador de un prestigioso Museo de Artes, donde naturalmente quedará exhibido el auto, que no está registrado para circular en la vía pública.

Y si bien Robillard decidió despegarse de su última creación, ahora el objetivo es volver al ruedo y crear otro modelo importante para Citroën: se trata de un DS21 descapotable, que espera terminar para 2025, cuando se cumplan 70 años de este particular exponente de la marca del doble chevrón que sin dudas marcó una era.