Si el nombre Trax te suena es porque Chevrolet utilizó esa denominación para comercializar la “vieja” Tracker en Estados Unidos. Ahora, en ese mercado la marca del moño vuelve a utilizar ese nombre para comercializar un SUV que buscará posicionarse como el modelo más accesible del catálogo en Norteamérica, tras la salida de los Spark, Sonic y Cruze. 

Lo cierto es que este Chevrolet Trax luce prácticamente similar y comparte diversos componentes con el Seeker, un SUV que la automotriz oriunda de Detroit develó hace poco en China. 

Más allá de eso, en materia de estilo el nuevo modelo se pliega a la última corriente de diseño del grupo General Motors, con una generosa parrilla y ópticas bipartidas, donde las luces principales están ubicadas por debajo, en un ejercicio similar al que aplicó la filial brasileña en la futura Montana. 

En los laterales la línea de cintura ascendente le aporta personalidad, sumado a guardabarros traseros musculosos que le dan una solidez visual particular. Por último, el remate también es novedoso ya que incorpora una caída de la luneta más suave que da como resultado un diseño atractivo y moderno. 

En el interior, el Chevrolet Trax eleve notablemente la vara en materia de diseño y calidad percibida, sobre todo si lo comparamos con la gama de productos del Mercosur. En este sentido se destaca la presencia de diferentes tonalidades y terminaciones que contribuyen a una mejora en la sensación de calidad. 

Y si hablamos de multimedia, las versiones más baratas apelarán a un instrumental convencional de agujas con una pantalla central pequeña, que además se complementará con una pantalla de 8’’ para el sistema multimedia con android auto y carplay inalámbricos. 

Por su parte, los niveles más equipados del catálogo tendrán un cuadro 100% digital de 8’’ acompañado por un sistema de entretenimiento de 11. En esta gama el usuario podrá encontrar mayor equipamiento como climatizador, arranque y acceso sin llave, butacas calefaccionadas y asiento del conductor con regulación eléctrica. 

Respecto de la seguridad, Chevrolet Trax estará equipado con un conjunto de ADAS agrupados en un paquete denominado Chevy Safety Assist. El mismo incluye la presencia de frenado autónomo, detector de peatones y alerta de colisión frontal, a lo que se suman el asistente de cambio de carril y las luces altas automáticas. 

Bajo el capot, a diferencia del Chevrolet Seeker chino, el Trax incorpora un motor 1.2 de tres cilindros que entrega 139 CV y 220 Nm de torque, que significa una caída de 18 CV y 20 Nm de torque frente al anterior 1.4 turbo que utilizaba su antecesor. 

Respecto de la transmisión, está a cargo de una caja automática de seis velocidades, a diferencia de otros exponentes que la marca comercializa en Estados Unidos como la Trailblazer (un SUV de dimensiones inferiores pero con un precio mayor) que apela a una caja CVT. 

Por último, a diferencia del modelo anterior que sí se ofrecía con tracción integral, al igual que Tracker, en este caso la nueva generación se comercializará únicamente con tracción delantera. Esto se debe a que, según la propia marca, el 70% de los compradores del Trax anterior elegían la tracción simple. 

Así las cosas, si bien estamos ante un SUV que por el momento se venderá únicamente en la región asiática y también Estados Unidos, hay que prestar atención porque futuros modelos de Chevrolet en la región podrían heredar varios elementos no solo en términos estéticos, sino también de equipamiento y planteo del diseño interior.