Accidentes: ¿qué hacer ante un inminente choque frontal?

En los últimos tiempos se ha registrado un incremento de los accidentes fatales en las rutas de nuestro país. Si bien no disponemos de estadísticas actualizadas y confiables, las informaciones de distintos medios nos muestran la realidad.

No cabe la menor duda que las peores consecuencias se producen con choques de frente por distintas razones. ¿Irresponsabilidad?, ¿conductores con problemas de visión?, ¿falta de reflejos?, ¿desconocimiento del poder de aceleración de su auto?…y una decena más de factores que producen incidentes fatales con demasiada frecuencia.

Todos los que hemos transitado miles de kilómetros en ruta nos hemos encontrado, en alguna oportunidad, con una situación complicada. En lo personal, viajando por la RN8 entre Arias y Canals me dispuse a pasar un camión que vendría a 80 o 90 km/h sin darme cuenta que venía detrás de una vieja chata que no estaba a la vista al encarar el sobrepaso.

En sentido contrario venía un auto y en la mitad de la maniobra advertí que no llegaba a superar a ambos vehículos, pero tampoco a frenar como para abortar. Como la única alternativa era un choque de frente me tiré a la banquina izquierda adelantándome a lo que pudiera hacer el otro. No es una maniobra para recomendar y no quiero que ser mal interpretado o que me saquen de contexto (como suelen decir nuestros políticos) pero las consecuencias de un choque frontal son catastróficas. Simplemente, en este caso, fue una opción entre la vida o la muerte… ¿se entiende?

Durante mis años jóvenes debido a mi actividad en la revista Corsa, tuve oportunidad de viajar, incluso ser acompañante en carrera de grandes pilotos de la época. Uno de ellos, Gastón Perkins, hombre habituado a manejar en ruta entre su campo en Vedia y Buenos Aires me dio una lección sobre el tema que me quedó grabada y que a partir de ese día tuve en cuenta a través de los años desandando cientos de miles de kilómetros en distintas rutas: “Mirá, Colorado, la gente maneja muy mal y te podés encontrar con alguien que sale de pronto a pasar un camión y vos venís de frente a mayor velocidad. Siempre es preferible tirarte a la banquina opuesta para alertar al que viene en sentido contrario dejándole paso en el asfalto aunque termines volcando pero nunca  pegarte de frente. Si estás atado un vuelco difícilmente sea mortal… a lo sumo algún hueso roto pero te salvaste la vida. De frente, jamás… lo que pasa es que los conductores le tienen terror a la banquina”.

Estas breves líneas no intentan ser un consejo a los lectores pero llegado el momento puede ser una alternativa ante la vida o la muerte que se debe decidir en cuestión de segundos. Es para pensarlo, ¿no?