Mecánicas y prestaciones: Renault Sandero vs Stepway
Aprovechamos el lanzamiento de la renovación de gama B del rombo para hacernos de un Sandero y un Stepway (ahora independizado). Te contamos como se comportan los conjuntos mecánicos en ambas versiones.
Cómo viene pisando el Sandero. Hace casi 15 años que está entre nosotros y parece por ahora, mantenerse estoico en uno de los segmentos más importantes y de volumen del mercado.
Ahora con una doble oferta, nos hicimos del Sandero “tradicional” y de su hermano aventurero Stepway para analizarlos y orientarte en cuál de los dos te conviene si estás pensando en una renovación.
Motor y Transmisión
El K4M de principios de milenio dejó lugar al SCe, una familia de bloques con partida de nacimiento fechada en 2016 con la firma de Renault Technology Americas, es decir, con un desarrollo regional. En cuanto al 1.6, está íntegramente concebido en aluminio con lo cual acusa ¡30! kilos menos en la balanza que su antecesor y algunos de sus componentes tiene un recubrimiento denominado Physical Vapor Deposition que hereda de la Fórmula Uno para reducir la fricción. Según la marca la mejora en el consumo es de un 21% aproximadamente.
Pero según nuestros registros, respecto del 1.6 manual anterior solo tuvo mejor rendimiento circulando a 130 km/h, siempre hablando del manual ya que por cuestiones lógicas no tiene sentido compararlo con el CVT que, dicho sea de paso consume algo más.
Vamos a los datos. A 100 km/h piden 6,9 y 7,1 (girando a 2.800 y 2.000 RPM), a 130 7,9 y 9,1 (a 3.600 y 2800 RPM). En el ámbito urbano Sandero saca una pequeña luz de ventaja con un consumo promedio de 11 litros y monedas contra los 12 del CVT.
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Las transmisiones juegan un rol fundamental en esta gama. Primero porque marcan su origen: manual tiene DNI cordobés y CVT pasaporte brasileño. Pero más allá de eso, su naturaleza es muy distinta. Huelga decir que la CVT (seis “velocidades”) es una oda al confort desde el vamos por prescindir de un pedal, mientras que la manual además, tiene cinco marchas. Dato no menor: el CVT gira a 130 lo mismo que el manual en quinta a 100.
Comportamiento y prestaciones
Cortito y al pie: el manual es algo más veloz que el 1.6 anterior. El Stepway penaliza un poco la caja CVT y se demora más en llegar a los 100. Por lo demás, Sandero tiene cifras muy similares a lo que registramos con el último Sandero manual medido (junio 2015).
El chasis que acompaña siempre fue la piedra fundamental para el destacado confort de marcha al que nos tenía acostumbrados la familia, incluso con la “barra” en el eje trasero. Sorprendentemente en esta nueva partida, nos llamó mucho la atención la rigidez de los modelos, independientemente de las llantas de 15 (Sandero) y 16 (Stepway) que poco inciden en esta aspereza.
Y acá una peculiaridad: no comparten fabricante. En Sandero los cauchos son Pirelli P1, con un dibujo citadino y un talón de 65, mientras que Stepway calza Bridgestone Turanza con talón 55. Ambos netamente urbanos con vistas a mejorar el grip en pavimento seco y mojado.
Mención especial para la dirección también que nos pareció excesivamente trabajosa en ciudad a la hora de maniobrar y también para los frenos, que detuvieron a ambos modelos en 40 metros y monedas.
Periodista deportivo. Egresado de DeporTEA, en 2001. Ingresó en Motorpress Argentina en marzo de 2004 y desde entonces se dedica de lleno al mundo de los motores. Arrancó produciendo contenidos para los canales “Autos” y “TC 2000” del portal Terra Argentina y luego ocupó diferentes cargos en todas las publicaciones especializadas de la editorial: Auto Test, Auto Plus, La Moto, Transporte Mundial y Maxi Tuning.
Desde comienzos de 2018 es Content Manager del multimedio digital MotorDigitalPress.