VW T-Cross: Confort, puntos altos

El acceso a la T-Cross se realiza sin llave, es decir mediante proximidad. También el arranque se efectúa sin necesidad de utilizar el tambor, ya que se realiza presionando un botón ubicado cómodamente al lado de la palanca de cambios (algunos lo prefieren en la plancha, frente al volante, pero es cuestión de acostumbrarse).

Nuestra unidad de prueba es la versión Highline –la más equipada y con caja automática Tiptronic de seis marchas– que además cuenta con varios opcionales como faros full LED, techo solar panorámico y sistema de estacionamiento automático, tanto de forma perpendicular como paralela al cordón, además del Park Pilot.

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En lo referente al confort dispone de climatizador automático con salidas posteriores, volante multifunción regulable en altura y profundidad con levas que comandan la caja automática, computadora de a bordo que puede replicarse en el panel de instrumentos con pantalla táctil, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, cámara de marcha atrás, espejos rebatibles eléctricos, detector de fatiga y presión de neumáticos.

Como equipamiento destacado dentro de su segmento, para los ocupantes de las plazas traseras ofrece doble salida de aire (climatizan de forma muy eficiente toda la zona posterior), los respaldos son reclinables y también un par de puertos USB para cargar los dispositivos portátiles (ideal para que los más pequeños viajen entretenidos con la tablet o el celu).