Diego Maradona y su vehículo más imponente: así llegaba el 10 al entrenamiento de Boca

Diego Maradona siempre fue conocido por, además de brillar en la cancha, tener un gusto particular por los autos. A lo largo de su carrera fue propietario de una larga lista de superdeportivos y clásicos, pero el vehículo más imponente que estuvo en su cochera fue un camión Scania 360 azul, que el 10 había adquirido en 1997. Hoy, se cumplen 24 años del día que Maradona llegó al entrenamiento de Boca a bordo de semejante aparato. 

Según dicen, Maradona pensaba arreglar todos los detalles del Scania en cuestión (un modelo 113H “trompudo) para salir a recorrer el país y hacer una especie de campaña antidrogas. Claro que aquella iniciativa quedó en la nada y luego de varios años el camión se vendió. 

Las anécdotas con el Scania no terminan ahí. Aquel 16 de octubre de 1997, unos cien metros antes de arribar al complejo de Ezeiza donde se desarrollaban las prácticas de su equipo, el vehículo se detuvo por una falla mecánica. El exrepresentante del Diego, Guillermo Coppola, llamó a un mecánico, quien arribó posteriormente y solucionó el problema: le habían cargado combustible en el tanque equivocado. 

El Scania 113H en su versión más potente de aquellos años contaba con un motor turbodiésel de 11.000 cm3 de cilindrada, 6 cilindros en línea y una potencia de 360 CV (de ahí su denominación 360 HP Top Line). La transmisión se realizaba por medio de una caja de diez velocidades. 

Pese a que no lo utilizó demasiado, la historia dice que el camión era uno de los vehículos favoritos del Astro. “¡Vieron qué linda maquinita! Ahora va a ser difícil hacerme notas: ningún periodista se va a poder colgar”, solía contar Maradona a sus amigos. 24 años después, estas anécdotas siguen dando que hablar, sobre todo en las sobremesas que combinan quizás las pasiones más grandes de nuestro país: el fútbol y los fierros.