La coupé más emblemática de Renault: encuentran una unidad única casi sin rodar
Te mostramos una unidad de uno de los Renault más emblemáticos de nuestro mercado, que supo ser un objeto de deseo de los jóvenes fierreros en la década del 80. Mirá todos los detalles.
La coupé Fuego forma parte de ese grupo de modelos de Renault que calaron hondo en el público argentino. Sobre la plataforma de un sedán tradicional como era el Renault 18, los del rombo habían desarrollado un modelo que sorprendió con sus líneas y un diseño muy adelantado para la época.
En esta oportunidad nos encontramos con una unidad que fue un hallazgo de @volkshop_argentina el año pasado. Se trata de una Renault Fuego que apareció en algún galpón de nuestro país con un poco de polvo acumulado, aunque la sorpresa viene por el lado del kilometraje: el odómetro marca apenas 3.815 kilómetros recorridos desde que esta unidad pisó la calle por primera vez hace 40 años.
Algunos detalles del exterior como las llantas (heredadas del 18) evidencian que se trata de una de las primeras Renault Fuego. En el interior los tapizados de cuero están como nuevos y no hay ningún indicio de maltrato o descuido por parte de el (o los) dueños anteriores.
Bajo el capot, esta Renault Fuego viene equipada con un motor de 2 litros de cilindrada, otra herencia del 18. En este caso la potencia es de unos 100 CV, mientras que la transmisión está a cargo de una caja manual de cinco velocidades, que mueve exclusivamente al eje delantero, algo que marcaba la principal diferencia entre la Fuego y la coupé Sierra XR4, uno de sus principales rivales.
Breve historia de la Renault Fuego: una coupé que marcó una época
Durante la década del 80 el parque automotor argentino compartía buena parte de modelos con Europa. En ese contexto, Renault realizó una importante inversión en su fábrica de Santa Isabel para renovar la línea de producción y lanzar nuevos modelos al mercado argentino. Uno de ellos fue la Renault Fuego, una coupé que debutó en el país en julio de 1982, dos años después de su presentación en Europa.
La Fuego compartía plataforma y diversos componentes con el Renault 18 y se sumaba a la línea de montaje del centro industrial cordobés, que en ese momento se encontraba retirando a una verdadera eminencia para nuestra industria como lo fue el Torino.
Las primeras Fuego utilizaban un motor 2 litros similar al del Renault 18 pero con algunas modificaciones que permitieron incrementar la potencia a 103 CV sin comprometer el consumo de combustible.
En cuanto a su diseño, la Fuego heredaba la plancha de a bordo del sedán del cual derivaba, pero se diferenciaba en detalles como el volante y las butacas tipo “pétalo” para ofrecer una mejor sujeción lateral.
Con el tiempo, la Renault Fuego se fue consolidando en el mercado y sumando equipamiento. En 1987, sus prestaciones se incrementaron con la llegada del motor J6T con 2,2 litros de cilindrada que entregaba 116 CV, permitiendo a la coupé alcanzar una velocidad máxima de 193 km/h y acelerar de cero a cien en 9 segundos.
En 1988, la Renault Fuego recibiría una importante actualización estética con la versión GTA. La coupé presentaba nuevos paragolpes, zócalos y molduras en color carrocería, así como también faros traseros oscurecidos. Con estas novedades, la Fuego consolidó su liderazgo en Argentina.
La última evolución de la coupé Fuego llegaría en la década del 90 con la versión GTA Max, que incrementaba la potencia hasta los 123 CV, que le permitían acercarse a los 200 km/h de velocidad máxima. Esta variante también presentaba algunos cambios estéticos y novedades en el interior.
En septiembre de 1992 la producción de la Renault Fuego llegó a su fin, luego de alcanzar las 19.952 unidades fabricadas. El modelo había logrado un gran éxito comercial y deportivo en Argentina, marcando a fuego -valga la redundancia- la historia de la industria automotriz del país.