Así es el Ural Arctic 10×10: el camión ruso que puede sumergirse y cruzar la nieve más hostil
¿Un camión que atraviesa la nieve profunda, resiste –50 °C y hasta puede sumergirse? Parece una exageración, pero el nuevo Ural Arctic 10×10 es una realidad desarrollada en Rusia para conquistar los paisajes más implacables del planeta. Este modelo de la marca UralAZ está pensado para operar en zonas árticas, donde ni los vehículos más robustos se atreven a avanzar.
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El Arctic 10×10 nace como una evolución extrema del camión Ural‑427701‑75, pero lleva sus capacidades a otro nivel gracias a una configuración única que combina tracción en los 10 ejes, una cabina calefaccionada, ruedas de baja presión gigantes y un remolque electrificado. Un conjunto pensado para no detenerse ni ante el frío extremo, ni la nieve densa, ni los cuerpos de agua.
Desde su diseño exterior, el Ural Arctic impone respeto. Construido sobre un chasis reforzado tipo tractor, se apoya sobre neumáticos Nortec H‑23 en medida 28LR26, de perfil ancho y presión reducida, ideales para “flotar” sobre nieve profunda sin hundirse. Pero lo que lo hace aún más llamativo es su configuración con seis ejes: tres en el tractor y tres más en el semirremolque, que incluye dos ruedas con tracción propia.
Este diseño modular también ofrece versatilidad. El remolque, que puede intercambiarse por otro convencional, está equipado con un motor eléctrico de 72 kW (unos 98 CV) que se alimenta de un generador diésel de 100 kW. Este sistema le permite mantener la tracción trasera en condiciones resbaladizas, aumentando notablemente la capacidad de avance en zonas hostiles. Además, incorpora un cabrestante de 8 toneladas, útil para auto-recuperación si llega a quedar atascado.
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En términos de características funcionales, este camión está desarrollado para entornos polares. Posee calefacción en todas las líneas de combustible, sistemas anti-congelamiento y una autonomía de hasta 500 km. También puede vadear cursos de agua de hasta 1,3 metros de profundidad sin modificaciones, lo cual lo convierte en uno de los pocos vehículos de su tipo con capacidades semi-anfibias reales.
La motorización del Ural Arctic 10×10 corre por cuenta del robusto YaMZ-53677.10, un motor turbodiésel de seis cilindros en línea, con 6.7 litros de cilindrada. Este bloque desarrolla 310 caballos de fuerza y un torque máximo de 1.100 Nm, transmitidos a través de una caja manual de nueve velocidades con reductora. Esta combinación mecánica le permite arrastrar cargas pesadas en condiciones extremas sin comprometer la fiabilidad.
Aunque por ahora no se conocen cifras oficiales de precio, es esperable que su valor supere con creces al de un camión todoterreno convencional, debido a su configuración exclusiva, equipamiento especializado y el uso de tecnología electrificada en el remolque. De todos modos, su aplicación apunta a nichos específicos como la exploración polar, el transporte logístico en zonas de nieve perpetua y operaciones científicas o militares.
El inicio de la producción estaba previsto para mediados de 2024, tras una demora causada por la falta de componentes. Si logra superar ese cuello de botella, el Ural Arctic 10×10 podría ser la respuesta perfecta para aquellos desafíos donde los caminos simplemente no existen. En mercados como el argentino, con presencia en la Antártida y proyectos logísticos en zonas australes, no sería descabellado imaginar una versión adaptada circulando por los hielos sureños en un futuro cercano.