noticias |

Carlos Figueras: los «secretos» del nuevo 208

Tal como dejamos establecido en la prueba que realizamos del Peugeot 208, esta nueva versión del modelo se muestra superior en muchos aspectos. Esta es la charla que mantuvimos con uno de los responsables de la configuración para adaptarlo a nuestras calles y rutas.

Durante décadas he manejado todos los Peugeot -desde el 404- que se lanzaron en nuestro mercado. Históricamente la característica más sobresaliente de todos los modelos de la marca fue su valorado confort de marcha. Sin embargo en los últimos tiempos varios de ellos mostraban un extraño comportamiento de la suspensión trasera al superar, por ejemplo, ciertas irregularidades como lomos de burro. El eje trasero al “descolgarse” producía un golpe seco poco agradable que sin duda se traducía en un deterioro en la suavidad de marcha.

Hace unas semanas Peugeot me entregó una unidad del nuevo 208 en su versión full para comunicarles mis impresiones sobre el comportamiento y consideré que el lector también tenía derecho a conocerlas. No voy a entrar en detalles, debido a la completa prueba realizada en su momento por Guido (Tonelli) se hace innecesario reiterar conceptos. Por esa razón decidí consultar con las fuentes acerca de las ventajas de esta nueva plataforma y diseño de las suspensiones que le confieren un eficiente equilibrio y un desempeño superior tanto en ciudad, así como un comportamiento dinámico en ruta poco habitual en este segmento.

Por esa razón tomé contacto con Rodrigo Morán, viejo amigo (no por la edad) de auto test y que actualmente es uno de los responsables de Desarrollo de Producto de la marca francesa. “La nueva plataforma nos permitió concebir un 208 más bajo, más liviano y a la vez con una robustez estructural y un chasis más eficiente respecto al anterior. Tras varias pruebas que realizamos en distintos puntos del país junto a técnicos de Francia logramos que mejorara la percepción del tren posterior y se modificó, entre otras cosas, el tope hidráulico en los amortiguadores delanteros. Incluso el auto al doblar rola en forma progresiva y más lenta por lo que se hace mucho más manejable y respeta las trayectorias sin vicios. Por otra parte mejoramos el funcionamiento del ESP modificando su calibración. La configuración, en general, es similar a la que Peugeot definió en las unidades que se comercializan en los mercados de Eslovaquia, Marruecos y ahora en Argentina.”

También noté una mejor posición de manejo, tal como apuntaba Tonelli. La butaca del conductor tiene una regulación más amplia, en especial a lo largo, y el volante en el nuevo 208 está “mordido” también el parte superior, aunque en mi caso por las características de mi humanidad, el aro se interpone y no permite visualizar correctamente el instrumental. Pero es un tema personal.

En la charla que mantuve con Rodrigo no sólo hablamos de las suspensiones. “También trabajamos en otros aspectos como el sistema de dirección que ahora es mucho más directo y preciso, así como en los frenos. En las pruebas logramos bajar 4 metros en la distancia de frenado a 100 km/h respecto a su antecesor. También depende el tipo de neumáticos que se utilizan ya que hay que lograr un equilibrio armónico entre suspensiones y rodado para conseguir el objetivo propuesto”. Al consultarlo sobre la capacidad del chasis confirmó mi sensación de que está en condiciones de albergar un motor de mayor potencia. “Sin duda…incluso en Europa hay una versión GT con un motor de 130 CV pero como vos decís, está aún para mayor potencia”. A esta altura arriesgué que aceptaría sin mayores problemas potencias del orden de los 150/160 CV. “Seguramente, pero sería una versión mucho más deportiva y dirigida a un público específico”.

El tiempo que estuve al volante del nuevo 208 me dejó la sensación de estar frente a un auto, sin duda, muy superior al anterior. La breve charla con Rodrigo Morán sirvió para confirmar algunas de estas impresiones y despejar algunos interrogantes.

ENTREVISTADO 2