Los mejores autos de The Office

Durante la cuarentena una de las series que vio el equipo de auto test fue The Office (“La Oficina”) ¿habrá sido porque extrañan el día a día en la redacción de Motorpress? Como sea, hicimos una lista de los autos más reconocidos de la historia de la serie y destacamos cinco. Arranquemos.

Por rareza y porque tiene varios momentos destacados en la historia, la Ford Aerostar de Meredith se lleva el quinto lugar. Allí llevan a Dwight al hospital luego de su choque y posterior conmoción cerebral y, en la temporada 8, Andy Bernard la usa para vigilar a Erin y a Robert luego de la fiesta navideña.

La camioneta es casi una desconocida para nosotros e incluso para los Estados Unidos, donde se fabricaba. Duró algo más de 10 años (entre 1985 y 1997) y fue reemplazada por la Windstar luego de que la planta de Missouri hiciera algo más de 2 millones de unidades.

En cuarto lugar elegimos un Chevrolet Camaro. Si bien es un recontra clásico de la historia automotriz, nos quedamos con este que, aunque tuvo poquito tiempo en la pantalla, hizo feliz a Stanley que “iba a estar una semana sin su familia en Florida” y por eso alquiló esta bomba descapotable en su variante SS. Durante el breve tiempo que lo manejó lo sacó de paseo a Jim y hasta le dejó elegir la música.

El podio lo abre uno que se vendió en nuestro país y que ofició de móvil familiar para Jim y Pam. Si bien los dos manejaron Toyota (Yaris y Corolla), se inclinaron por el Subaru, que acumuló un par de multas cuando Michael se ofreció a ser el conductor la tarde que los Halpert-Beesley fueron papás y no tuvo mejor idea que dejarlo en la entrada para ambulancias.

En segundo lugar ponemos al Pontiac TransAm. Su dueño lo choca en la segunda temporada, oficia de móvil para un Stanley sedado y hasta es detenido en la ruta por la Policía por usar una falsa sirena. Estamos hablando del auto de Dwight Schrute, uno de los mejores personajes de la serie.

El primer lugar fue entre dos convertibles: PT Cruiser y Sebring. Nos vamos a inclinar por el Chrysler porque, a juzgar por la reacción de Michael Scott al ofrecérselo a Dwight, era el preferido del jefe y, además, el auto que le correspondía por su puesto gerencial.

Con el Sebring (tuvo dos) pasaron varias cosas: Scott atropelló a Meredith, Stanley le rompió los vidrios y hasta fue blanco de mil calcomanías de Wuphf, la red social de Ryan Howard que no prosperó. ¿Cuál agregarías?