¿Cuántas muertes se podrían evitar en Argentina?
Seis países de la región podrían reducir notablemente sus muertes al volante, alrededor de 60.000 por año, si se adoptan nuevas propuestas de seguridad de Latin NCAP y las normas de seguridad vehicular de Naciones Unidas. Enterate cuáles son.
El Informe final del Proyecto Bien Público Regional (BPR) “Mejoras de los Estándares de Seguridad de los vehículos en América Latina y el Caribe a través de la adopción de Reglamentos de Naciones Unidas (ONU) y sistemas de información al consumidor”, liderado por el Banco Interamericano de Desarrollo, analiza los potenciales efectos en salud pública y el impacto económico en la región como consecuencia de la incorporación de tecnologías de seguridad en vehículos. El reporte comprende la información de los países firmantes del BPR: Argentina, Brasil, Colombia, Ecuador, Mexico y Uruguay.
El Informe realiza el análisis de las regulaciones existentes en estos países, genera una propuesta de regulación para una aplicación eficiente y para el proceso de homologación. La segunda parte del estudio, realizada por la Universidad de Chicago, analiza los potenciales impactos en la salud, a partir de la estimación del número de vidas que se salvarían y la carga por discapacidad evitada como consecuencia de la adopción de los reglamentos de seguridad. La tercera parte del estudio elaborada bajo la supervisión de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) analiza los impactos económicos en términos de ingresos y empleo, intercambio comercial e implicaciones fiscales en los países de América Latina y el Caribe (ALC), como resultado de la posible adopción de los Reglamentos ONU seleccionados.
Accedé al Reporte completo aquí
Las tecnologías de seguridad vehicular evaluadas en este estudio son: Sistema de frenos antibloqueo (ABS en inglés), Control Electrónico de Estabilidad (ESC en inglés), bolsas de aire (airbags) frontales, bolsas de aire laterales, cinturones de seguridad, barras de impacto lateral en las puertas, protectores laterales, apoyacabezas y diseño frontal del vehículo para la protección de los peatones. Las tecnologías analizadas en el Reporte detalladas deben cumplir con los requisitos técnicos que se proponen desde el WP.29 de Naciones Unidas.
En el caso de darse una adopción total de las tecnologías analizadas, se estima una reducción general potencial para los países que comprende el informe de 33.000 (28%) menos fatalidades anuales, y un máximo de 53.400 fatalidades.
Por otra parte, es importante tener en cuenta que los programas NCAP pueden llevar a los fabricantes a desarrollar diseños que brinden una seguridad que superen los requisitos mínimos de los reglamentos de ONU. Por ejemplo, este análisis demuestra que la región de ALC vería reducciones mucho mayores en el impacto lateral, otras 7.400 muertes, si se utilizaran mecanismos como el NCAP para alentar a los fabricantes a hacer los mejores diseños de vehículos disponibles en la región.
Para el efecto del ESC (incluidos los efectos del ABS) se obtendría como resultado la reducción de entre 10.000 a 37.000 muertes al año, con una estimación general de 22.800 (19%) menos muertes en la región. En lo que atañe al aumento de la disponibilidad de bolsas de aire (airbags) frontales, las cuales son efectivas para complementar a los cinturones de seguridad en impactos frontales, permitiría una reducción de 2.700 a 5,100 muertes anuales, con una estimación general de 4.100 (3.5%) menos fatalidades en la región de ALC considerando la amplia presencia de estos elementos hoy en día. Las bolsas de aire laterales que incluyen protección para la cabeza son la tecnología más importante para mitigar las muertes y lesiones en los casos de impactos laterales, pues la región podría observar de 2.500 a 4.000 menos muertes al año, con una estimación general de 3.300 (3%) menos muertes por la creciente disponibilidad de bolsas de aire laterales.
El diseño frontal del vehículo para la protección de peatones es especialmente importante porque los peatones representan una gran proporción de fatalidades en muchos países. La región de América Latina y el Caribe experimentaría una reducción de entre 4.400 y 7.300 muertes, con una estimación principal de 7.100 (6.0%) menos muertes al año, al aumentar la disponibilidad de vehículos diseñados para la protección de los peatones.
Se debe considerar que decenas de miles de lesionados también se evitarían o mitigarían, pero no fueron cuantificadas en este estudio.